Un equipo de investigadores de la Universidad de Cambridge, la Universidad de Granada y la Universidad de Medicina Veterinaria de Viena, descubrió cómo ciertos tipos de abejas sin aguijón pueden construir sus nidos en formas espirales altas.
por Bob Yirka, Phys.org
En su artículo publicado en Journal of the Royal Society Interface , el grupo describe la aplicación de las lecciones aprendidas del estudio de los cristales para comprender mejor cómo las abejas pueden crear estructuras exóticas.

En 2018, una imagen de una colmena espiral (peine de cría) creada por un tipo de abeja sin aguijón nativa de Australia llamada Tetragonula carbonaria, se volvió viral en Internet. La gente quedó impresionada por la capacidad de las abejas para crear estructuras que no solo eran arquitectónicamente impresionantes, sino que también eran fascinantes en su belleza. En ese momento, los científicos no tenían explicación de cómo una criatura tan simple podría crear estructuras tan magníficas de la cera. Una mirada más cercana mostró que las abejas crearon sus células en formas hexagonales, luego agregó comida regurgitada, y luego la reina depositó un solo huevo en la celda. Los investigadores con este nuevo esfuerzo estaban estudiando patrones similares en cristales y en nácar creados por moluscos. Después de descubrir que tales patrones podrían crearse aplicando un algoritmo muy simple, los investigadores centraron su atención en las abejas en Australia.
Para averiguar si las abejas estaban usando un algoritmo similar, los investigadores modelaron sus atributos y comportamientos en una computadora para crear una simulación de su comportamiento de construcción de nidos. Al hacerlo, descubrieron que las abejas podían crear fácilmente estructuras espirales siguiendo dos reglas muy simples. Cuando llegó el momento de construir una nueva celda, podrían agregar una celda al frente de crecimiento, que era el borde del peine en construcción, pero tenía que colocarse un poco más alto que sus vecinos, o podrían construir una nueva celda en parte superior de otra celda, siempre que estuviera nivelada en comparación con las otras celdas del nido . Los investigadores señalan que las abejas que siguen un algoritmo de este tipo pueden construir nidos tan altos como les conviene, lo que explica por qué pueden construir nidos con hasta 20 capas.

(b) Se observa que las abejas obreras pasan tiempo agrupadas en los bordes de crecimiento de las terrazas (T. carbonaria). Imágenes cortesía de Tim Heard.
Crédito: Revista de The Royal Society Interface (2020).
DOI: 10.1098 / rsif.2020.0187