Sobre el potencial acuícola del estado Anzoátegui – Venezuela


Germán Robaina G.

robainag@gmail.com


Uno de los estados venezolanos con mayor potencial acuícola es el estado Anzoátegui, pero también es uno de los que menos desarrollo posee en esta actividad.

Localizado al noreste del país, en el extremo occidental de la región nororiental, ocupa una superficie terrestre de 43.300 Km2, que representa el 4,75% del territorio nacional, siendo el sexto estado con mayor superficie en Venezuela.

Las alturas oscilan entre 0 y 2.485 m.s.n.m en el pico Peonía, pero predominan las tierras con alturas menores a 300 m.s.n.m identificándose desde un punto de vista físico-natural siete (7) unidades de paisajes predominantes, tales como las planicies costeras, las montañas, los valles, las colinas, las mesas, los bajos de ablación y las planicies de desborde del río Orinoco.

El relieve predominante en más del 90% del estado, lo constituyen las tierras planas y onduladas que forman paisajes de mesas. El Macizo del Turimiquire y la sección terminal de la Serranía del Interior son los únicos sectores montañosos del estado, mientras que hacia el noroeste del estado se observa la cuenca del río Unare, con un relieve de colinas bajas, y al sur la extensa franja de inundación a orillas del río Orinoco.

Clima:

Una temperatura que oscila entre los 25 y 28 °C, caracteriza a la entidad en sus sectores más bajos, la franja del norte es semiárida, con excepción de la serranía de Bergantín, colindante con el estado Sucre, cuyo clima presenta un periodo de lluvias prolongado y un corto periodo de sequía, en el sur sobrepasando un área de transición. El clima dominante es de sabana, con dos periodos bien marcados, el nivel de las precipitaciones fluctúa entre los 530 y 1400MMS al año.

Vegetación

La vegetación del estado es la típica vegetación intertropical, determinada en gran medida, por la altitud, el clima y el tipo de suelo, donde se alternan zonas de matorral espinoso, cujíes y especies xerófilas de pequeña talla.


Población

Con base en el desarrollo poblacional, el estado ocupa el octavo lugar con respecto al total nacional, con una población aproximada de 1.500.000 habitantes.

Actividades económicas. 

La producción de hidrocarburos representa una parte importante dentro del contexto estadal, ocupando un espacio físico considerable. En los sectores Anaco-Aragua de Barcelona y El Tigre se concentran los aspectos relativos a la fase extractiva, mientras que las actividades industriales de refinación se realizan en Puerto La Cruz, San Roque y en el denominado Complejo Criogénico de Jose.

El turismo, el sector de la construcción y las actividades agrícolas pueden ser consideradas las otras actividades de importancia.

Los principales rubros cultivados en la entidad son: maní, maíz, algodón, caña, sorgo, café, cacao, cambur, patilla, y raíces y tubérculos como batata, la yuca y el ñame.

La ganadería bovina y porcina, así como la avicultura y la pesca, registran cifras significativas al igual que la explotación forestal, sin embargo, a pesar de las grandes deficiencias alimentarias y nutricionales que presenta el estado, las actividades acuícolas están escasamente aprovechadas y desarrolladas.

El Plan de Desarrollo del estado para el periodo 2018-2021, cita tan solo dos (2) veces la palabra “acuicultura” (pág. 215 y 385) y una sola vez (1) la palabra “piscicultura” (pág. 332), evidenciando la poca importancia que se le otorga a estos sistemas de producción de tanto potencial productivo para su territorio.

Aun contando con una amplia red hidrográfica conformada por las cuencas de los ríos que drenan hacia el Mar Caribe (Unare, Uchire, Neverí El Guayabo, Zumbador, Colorado, Guamal, El León, Campo Solo, Río del Medio, Quebrada El Tigre, Naricual, Capiricual y Querecual, entre otros), hacia el Orinoco (Zuata, Caris, Pao y Claro) o hacia el Delta (Tigre, Guanipa, Amana y Morichal largo, entre otros), contar con un sistema de embalses construidos en la cuenca del río Unare ( La estancia, El Andino, El Cují, Vista Alegre, Santa Clara y La Tigra) con una capacidad de almacenamiento de 264 x 106 m3, así como extensos y abundantes acuíferos, una extensa línea costera con el Río Orinoco, y un grave desequilibrio poblacional con elevados niveles de pobreza y pobreza extrema en muchos de sus municipios de tipología rural (Mc Gregor con 25,1 %, Monagas con 17,9% y Cajigal con 16,5%), el estado se encuentra prácticamente de espaldas al desarrollo acuícola, y muy pocos desarrollos de este tipo se han realizado en su jurisdicción.

Requerimientos pesqueros

Aunque el Ministerio de Pesca y Acuicultura reporta para el año 2021 una producción pesquera de 3.765 t, para cubrir el consumo per cápita de biomasa pesquera estimada por FAO para la región (12 kg/hab/año), el estado Anzoátegui requiere generar un mínimo de 18.000 t de biomasa pesquera, sin tomar en cuenta la gran cantidad de esta biomasa (marina principalmente) que se desee destinar a cubrir déficit en otras regiones del país con menor producción.

Alternativas

Las alternativas para generar esta biomasa pesquera, además de la propia extracción pesquera de difícil aumento a bajo costo, lo representan las actividades de producción acuícola (camaronicultura marina y dulceacuícola, y piscicultura, principalmente).

La formulación y puesta en marcha de un programa de fomento acuícola para el estado que permita la generación de proteína pesquera en unidades de explotación a nivel extensivo, semi-intensivo e intensivo, es totalmente factible, y seguramente podría ser financiado por alguna de las numerosas agencias internacionales existentes, muchas de las cuales nos han manifestado durante los últimos 30 años su interés y disposición de participar en este tipo de desarrollo, o, en los actuales momento y circunstancias, por parte de países interesados en que le suministremos parte de la biomasa pesquera que logremos generar (¿50-50%?).

Ya en un artículo anterior (AREAS POTENCIALMENTE APTAS PARA EL DESARROLLO DE LA MARICULTURA NACIONAL) hablamos sobre la potencialidad de la franja marino-costera del estado para el desarrollo de actividades de acuícolas, señalando algunas locaciones y alternativas de gran interés, sin embargo, la vasta superficie plana o ligeramente ondulada de la mayoría del territorio del estado, unido a la presencia del recurso hídrico, hacen bastante viable el desarrollo de la actividad en gran parte de su territorio, requiriéndose, fundamentalmente, la puesta en marcha de granjas productoras de semillas (alevines y post-larvas), así como la producción de alimentos acuícolas por parte de alguna de las plantas ya existentes en el estado.

A pesar de contar con siete embalses en su jurisdicción -algunos de ellos con infraestructura y/o implementos-, ninguno de ellos funciona una unidad de producción piscícola que aproveche su gran espejo de agua, ni los miles de kilómetros de costas aptas para su desarrollo.

Un estado que posee una significativa pérdida del poder adquisitivo de su población para poder obtener proteínas de adecuada calidad para su alimentación y nutrición, y que registra los más bajos niveles de consumo per cápita de productos pesqueros del país, ni el gobierno nacional, ni el gobierno estadal, pueden continuar haciéndose los sordos, ciegos y mudos sobre este tema.

En lo que a la porción continental del estado se refiere, estimamos que utilizando apenas el 10% de la superficie actual de los embalses existentes, en aquellos debidamente seleccionadas según la calidad, su tasa de renovación, usos prioritarios y potencial para el cultivo de especies autóctonas como la cachama y sus híbridos, o granjas costaneras para especies exóticas como la tilapia y el camarón Macrobrachium, se puede generar más del 100 % de los requerimientos de biomasa pesquera que el estado Anzoátegui requiere.

la Gobernación del Estado, conjuntamente con la participación del sector privado nacional puede diseñar y poner en marcha un agresivo programa de producción masiva de biomasa pesquera, y solicitar a MinPesca y al Minec la utilización de estos cuerpos de agua y su zona costera bajo normas que garanticen no afectar al medio ambiente ni eutrofizar sus aguas, miedo este que parece ser la última excusa de los ambientalistas adversos a la actividad, y por qué no, además de alimento, promover la generación de las divisas que tanto requiere el país

Diseños, estrategias y experiencia de manejo de jaulas flotantes para el cultivo de cachamas existen en abundancia gracias a los trabajos anteriormente realizados en la Región Centro Occidental y de Guayana y los recientes avances y experiencias realizadas en los últimos 20 años en diferentes partes del mundo, mientras que el diseño y manejo de grajas de producción intensiva o hiper intensiva de tilapias garantizando el más estricto apego al cuidado y preservación del entorno ambiental, ya existen en el país y han demostrado su funcionalidad y viabilidad.

¿Sería exagerado y/o extemporáneo hablar de una Empresa Estadal de Acuicultura para el estado Anzoátegui?

Ideas, propuestas, esquemas y ante proyectos de inversión para una red de pequeñas, medianas o grandes granjas de producción acuícola se encuentran disponibles para su revisión por parte de las instancias interesadas.


Germán Robaina es colaborador destacado de Mundo Agropecuario

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