Recientemente, han aparecido muchos titulares en los medios de comunicación mundiales sobre casos de influenza aviar altamente patógena en vacas en los Estados Unidos. Como es habitual en estos casos, el suceso se presenta de forma extremadamente alarmante, pero lo que realmente sucede lo explica un experto veterinario.
Roy Graber ofrece una opinión experta expresada en un reciente seminario del sector en su artículo publicado en el portal WATTPoulry.
“No llamen altamente patógeno al H5N1 en el ganado; la misma variante del virus que fue altamente patógena en las aves de corral parece ser poco patógena en el ganado lechero”, dijo la Dra. Kay Russo, veterinaria y consultora de salud avícola y bovina de Novonesis, en un seminario de abril. dedicado a este tema.
La Dra. Kay Russo, graduada en 2010 de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Cornell, comenzó su carrera como practicante de ganado lechero antes de mudarse a Boehringer Ingelheim Vetmedica, donde ocupó puestos en marketing y servicio técnico de ganado. En 2017, se unió a Purina Animal Nutrition, donde realizó investigaciones sobre aditivos alimentarios para la salud del ganado vacuno y avícola y brindó apoyo de consultoría de campo. En 2023, recibió su Maestría en Medicina Veterinaria Avícola de la Universidad de Georgia y se unió a Chr. Hansen, ahora Novonesis, como gerente de servicios técnicos para el negocio lácteo y avícola.
Kay Russo dice que ahora que se ha identificado el virus de la influenza aviar en el ganado lechero en los Estados Unidos, se deben explicar a la gente las diferencias en los términos.
“Esta enfermedad del ganado no debería llamarse influenza aviar altamente patógena en este momento, dada su baja tasa de mortalidad y el hecho de que estamos tratando con ganado vacuno y no con aves. Tal vez la enfermedad debería llamarse gripe bovina de baja patogenicidad”, afirmó.
“La patogenicidad está determinada por el efecto que un virus particular tiene en los animales que infecta, y aquí se utiliza el término patotipo del virus. En cuanto al H5N1 en las aves, existen tanto cepas altamente patógenas como poco patógenas”, explicó el experto, mostrando diapositivas para compararlas con fotografías de pollos infectados con la cepa poco patógena.
Estos pollos, aunque algunos tienen las plumas erizadas y uno tiene el pico abierto que indica dificultad respiratoria, todavía caminan, comen y beben a pesar de sus problemas de salud. La siguiente diapositiva muestra una fotografía de un pavo infectado con una cepa altamente patógena, que ya está agonizando.
En las aves de corral con cepas poco patógenas, el virus está realmente limitado a los tractos respiratorio y gastrointestinal, dijo Russo. Las proteínas virales de la cepa avícola de baja patogenicidad son degradadas por enzimas principalmente en el tracto respiratorio y el tracto gastrointestinal, lo que limita la infección a estas áreas. Sin embargo, en variantes altamente patógenas, las proteínas virales son descompuestas por enzimas en todo el cuerpo, lo que permite que el virus infecte células en muchos sistemas de órganos y, en última instancia, causa un daño sistémico que es fatal.
Según estas definiciones, los casos de H5N1 en ganado bovino se definirían más apropiadamente como un patotipo de baja patogenicidad. Si bien es posible que hasta el 10% del ganado en los rebaños esté infectado, el ganado afectado no experimenta una mortalidad significativa, dijo.
Sin embargo, conviene recordar que cada vez que el virus de la gripe infecta a un nuevo huésped, puede mutar. Si se le permite infectar libremente a nuevos huéspedes, las mutaciones en el virus podrían eventualmente hacerlo más patógeno también en el ganado. Por eso es importante controlar las poblaciones susceptibles en los rebaños para reducir el ciclo y la mutación del virus. “Avicultores y ganaderos deben sentarse en la misma mesa y decidir cómo proceder”, concluyó el experto.
Fuente: www.wattagnet.com Autor: Roy Graber.
