La árnica se ha utilizado en la medicina popular durante siglos y sigue siendo una de las plantas medicinales más importantes de la medicina herbal europea.
Desde 2021, el centro suizo de agrociencia Agroscope trabaja en el desarrollo de una variedad de árnica de montaña ( Arnica montana ) que pueda cultivarse productivamente en condiciones locales. El objetivo es preservar las poblaciones naturales que están siendo destruidas por la recolección de plantas silvestres, así como proporcionar valiosas materias primas medicinales a la industria de la fitoterapia.
Con financiación de la Oficina Federal de Agricultura de Suiza, FOAG, los cultivadores de Agroscope se centraron en desarrollar una variedad de árnica de alto rendimiento que pueda cultivarse en suelos ligeramente ácidos, que constituyen la mayoría de las tierras agrícolas en Suiza.
Como explicó Simone Xavier Jean, de Agroscope, el punto de partida del trabajo fueron unas 100 unidades de semilla, la mayoría recolectadas en Suiza. Las líneas resultantes se están evaluando actualmente y se utilizarán para la selección final de la variedad de árnica, cuya disponibilidad se prevé para 2030.
La creación y popularización de esta variedad busca satisfacer las necesidades de la industria médica, preservando al mismo tiempo las reservas naturales de árnica. Los ungüentos y tinturas a base de árnica de montaña son muy populares en fitoterapia para el tratamiento del dolor y la inflamación tras lesiones leves.
Sin embargo, el suministro natural de esta planta medicinal ha disminuido drásticamente en los últimos años. Esta disminución se debe a la sobreexplotación mediante la recolección silvestre y se ve agravada por el cambio climático y las nuevas prácticas de pastoreo. El árnica se cosecha entera o por sus inflorescencias y es difícil de cultivar debido a su preferencia por suelos ácidos con bajo contenido de cal.
Fuente: Agroscope.
