Desde la época Colonial y Republicana, existen muchas historias de valor y honor por los derechos sociales, económicos y políticos del pueblo; desde las guerras de independencia, pasando por los combates armados por derrocar gobiernos nefastos, hasta las manifestaciones en las carreteras por justos precios de las materias primas agrícolas. En todos estos casos, El Montubio ha desempeñado un papel importante y decisivo para lograr conquistas no solo para su cultura, sino para todo el país.
Conversaba en días pasados con líderes como, Don Jorge Gallo Villao, Don Silvio Cedeño (ambos de Prov. de Manabí) y Doña Ninfa Zárate (Prov. Los Ríos) quienes, por su experiencia de vida, amabilidad, respeto y demostración de aprecio hacia mí, los considero mis amigos; recordábamos la creación de los Chapulos en el año de 1884 en la hda. La Victoria de Doña María Gamarra de Hidalgo (La ñata Gamarra), recordábamos las guerras Montoneras dirigidas por Don Eloy Alfaro Delgado allá por los años 1895. Don Jorge Gallo con emoción relató detalladamente una historia montubia que casi nadie sabe en el Ecuador, la huelga de hambre del año 2001.
Mujeres y hombres de las Provincias de Guayas, Manabí y Los Ríos, tomaron la decisión de someterse a una huelga de hambre, lejos de sus casas, acampando como en su tiempo los Montoneros en la selva Costeña, en la entrada del edificio del entonces Congreso Nacional en la ciudad de Quito, para luego de duros 25 días lograr el reconocimiento de la Institucionalidad del Consejo de Desarrollo del Pueblo Montubio de la Costa (Codepmoc), mediante Decreto Ejecutivo No. 1394 del 30 de Marzo del 2001, punto de partida para lograr equidad.
Cabe también mencionar que tiempo después en el año 2008, presencia montubia fuera de ciudad Alfaro (Montecristi – Manabí) mientras se reformaba la Constitución de la República del Ecuador, se logró mediante los artículos 56 y 59, que se reconozca la Identidad, Cultura y los Derechos colectivos de los Pueblos Montubios del Ecuador.
Acciones como la de los huelguistas montubios, son base y ejemplo de lucha para el moderno liderazgo campesino. Historias de valor y honor que nos dieron Institucionalidad e Identidad, y que nos hacen replantear la idea de la participación política directa. Solo desde las instancias políticas podremos tomar decisiones políticas a favor nuestro.
Pedro Pablo Jijón Ochoa es colaborador destacado de Mundo Agropecuario
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