El pasto cuarentón (Echinochloa crus-galli) es una maleza problemática muy conocida en cultivos de campo como el arroz, la soja y el maíz. La alelopatía y la resistencia a los herbicidas de esta maleza contribuyen a la invasividad y complican las medidas de control.
Una investigación realizada por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Argentina, en colaboración con el Instituto de Ciencias Agropecuarias del Litoral y el sector privado, confirmó el nivel de alerta roja por resistencia de la maleza Echinochloa crus-galli a los graminicidas. El monitoreo continuo y el ajuste de las estrategias de manejo se encuentran entre las principales recomendaciones para evitar una mayor propagación, según el portal oficial del Gobierno de Argentina.
Los investigadores informan sobre la resistencia del pasto cuarentón a los herbicidas de la familia FOP (cihalofop y haloxifop).
“Durante nuestra investigación, identificamos poblaciones de pasto cuarentón resistentes a estos herbicidas”, señaló Andrés Rampoldi, especialista del INTA Concepción del Uruguay, quien explicó que el herbicida cyhalofop es selectivo para el cultivo de arroz, es decir, puede utilizarse después de la emergencia y no afecta el rendimiento, pero controla las malezas.
«Con esta confirmación, ya no es posible controlar los arrozales con cihalofop y habrá que utilizar otros herbicidas y estrategias de manejo», advirtió Rampoldi.
Otro herbicida es el haloxifop, que se utiliza en el barbecho químico de los cultivos de primavera. Al respecto, Rampoldi destacó que al momento del anuncio no existían reportes de casos de resistencia de E. crus-galli a este herbicida en el mundo. Por ello, “el seguimiento y la prevención son muy importantes para evitar la propagación de este problema a otros cultivos, ya que el uso de estos herbicidas en tierras de secano (no en arrozales) es muy común”.
“Es vital que los administradores de campo, asesores y productores realicen un seguimiento más cercano de los campos para detectar ‘escapes’ o fallas de control de malezas que sobreviven o rebrotan luego de las pulverizaciones”, señaló el especialista del INTA.
Entre las recomendaciones clave, Rampoldi destacó: “Planificar el manejo de áreas resistentes rotando los modos de acción de los herbicidas y utilizando estrategias integradas como herbicidas residuales, cultivos de cobertura y, cuando sea necesario, utilizando estrategias de doble efecto para reducir el stock de semillas de malezas”.
“Si se sospecha resistencia, recomendamos hacer un seguimiento cercano de cada población, notificar al INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) y recolectar semillas para realizar los análisis correspondientes”, agregó Rampoldi.
Para concluir, el especialista señaló que “esta información es de suma importancia para el sector, ya que permite reducir costos (controlar fallas y necesidad de retrabajos) y optimizar el tiempo de toma de decisiones”.
Ignacio Dellaferrera (ICIAgro-UNL-Conicet-FCA) y Candela Mena (consultora privada) participaron en el estudio y presentaron la solicitud ante las autoridades correspondientes.
Fuente y foto: www.argentina.gob.ar.
