Los Países Bajos quieren desarrollar el mercado de consultores independientes de protección de cultivos


Es necesario separar a los consultores de los vendedores para lograr los objetivos orgánicos en los Países Bajos, dice el jefe del Ministerio holandés de Agricultura, Naturaleza y Calidad de los Alimentos.


Peter Adema, Ministro de Agricultura, Naturaleza y Calidad Alimentaria de los Países Bajos, ha iniciado un proyecto para separar el asesoramiento sobre sanidad vegetal y las ventas de productos fitosanitarios. Según el ministro, estos dos servicios deberían estar lo más separados posible, según el portal www.onderglas.nl.

“Actualmente, muchas consultoras están asociadas comercialmente con proveedores de productos fitosanitarios. Esto crea un incentivo financiero para que los consultores recomienden el uso de estos recursos agroquímicos. Sin embargo, los productores definitivamente deberían tener acceso a asesoramiento independiente sobre protección de plantas sin ningún incentivo financiero”, dijo el ministro.

Pretende en su proyecto vincularse con el Reglamento Europeo sobre el Uso Sostenible de Plaguicidas, que actualmente se encuentra en desarrollo. El reglamento contiene una cláusula que establece que los agricultores están obligados a recibir periódicamente asesoramiento puramente independiente sobre protección de cultivos. Dado que aún quedan algunos años antes de que el reglamento entre en vigor, Adema decidió introducir una obligación similar en los Países Bajos antes.

El ministro se prepara para ello, entre otras cosas, aumentando el número de asesores independientes, ya que hasta el momento solo hay unas pocas decenas de ellos en el registro ministerial. Como parte de la colaboración existente entre consultores y agricultores, también quiere mejorar la calidad de las recomendaciones para la protección fitosanitaria integrada.

El Ministro también busca la forma de dejar de pagar bonificaciones por la cantidad de productos fitosanitarios agroquímicos vendidos y, por el contrario, incentivar la venta y el uso de productos seguros y amigables con el medio ambiente, como feromonas, extractos de plantas y microorganismos.

Holanda planea que para 2030 el 15% de la tierra agrícola se utilice para la agricultura orgánica.

(Fuente: www.onderglas.nl).