Por qué entender esta industria es clave para la agroganadería mundial
Redacción Mundo Agropecuario
El panorama general: una gigantesca envergadura
China es, sin duda, el mayor productor y consumidor de carne de cerdo en el mundo. En 2021, el consumo anual rondó los 57 millones de toneladas, lo que representaba el 50 % del consumo global y casi el 60 % del consumo total de carne dentro del país. Esta industria ha llegado a tal escala que incluso mantiene una reserva estratégica de carne de cerdo, con el fin de estabilizar los precios y proteger los intereses de los productores.

Transformaciones recientes: de granjas tradicionales a megaproyectos verticales
La evolución del sector ha sido dramática. Entre 2018 y 2023, la cabaña porcina se recuperó de los efectos devastadores de la peste porcina africana (ASF), pasando de unos 310 millones en 2019 a alrededor de 434 millones en 2023.
Con el impulso de esta recuperación vinieron enormes inversiones privadas. Empresas como Muyuan Foodstuff operan hoy la granja porcina más grande del mundo, con capacidad para 2.1 millones de cerdos al año en estructuras verticales de tipo «de nacimiento a sacrificio».
Uno de los desarrollos más llamativos ha sido el diseño de edificios de más de 20 pisos, denominados “hog hotels”, que albergan millones de cerdos distribuidos por etapas (mestizas, crías, engorde), con alimentación automatizada, control ambiental avanzado y gestión de residuos integrada.
Modernización y retos estructurales
La intensificación del sector ha venido acompañada de tecnología: monitoreo por cámaras, sensores, sistemas de alimentación de precisión, incluso reconocimiento de voz e inteligencia artificial han irrumpido en las granjas modernas.
Al mismo tiempo, el país enfrenta retos considerables: sobreproducción, altos costos de alimentación, exceso de capacidad, escasez de alimentos para ganado y presión ambiental por residuos y emisiones.
Ajustes y correcciones recientes
Por estos problemas, el gobierno ha intervenido para evitar colapsos. Para frenar la sobreoferta, en 2024 redujo la meta de inventario de cerdas reproductoras a unos 39 millones y se implementaron límites a nuevas instalaciones, pesos de sacrificio y prácticas especulativas como la «segunda engorda».
En el tercer trimestre de 2024, la producción cayó 0.8 %, y la cabaña total cerró en alrededor de 426.9 millones de animales, reflejo de una demanda interna más floja.
Expertos como Zhu Zengyong, investigador en ciencias agrícolas, consideran que el consumo ha alcanzado su techo. Recomiendan seguir reduciendo costos y mejorar eficiencia antes que buscar mayor expansión.
Estrategias hacia una porcicultura resiliente y sostenible
Frente a los desafíos, el sector avanza hacia soluciones más responsables desde lo ambiental y productivo:
- Producción más verde: técnicas como alimentación precisa, uso de subproductos y reciclaje de estiércol son clave para reducir emisiones y mejorar la sostenibilidad.
- Sistemas integrados: grandes empresas combinan cría, engorde, alimentación y procesamiento para optimizar costos, controlar riesgos y garantizar bioseguridad.
- Control de brotes: tras enfrentar la ASF, los protocolos sanitarios y los sistemas de vigilancia son ahora mucho más estrictos en la industria porcina.
Referencias
- Panorama del consumo y producción porcina en China (2021): WikipediaWikipedia
- Impacto de peste porcina africana y recuperación de la cabaña (2019–2023): Financial Times
- Muyuan Foodstuff y sus grandes estructuras productivas: Wikipedia+1
- Innovación tecnológica y megaproyectos verticales (“hog hotels”): The Sunjournal.hep.com.cn+1Pig Progress+1Wikipedia+1
- Retos estructurales y ambientales: journal.hep.com.cnFAS Apps+1Pig ProgressFinancial Times
- Política de ajuste y reducción de sobreoferta: ReutersFinancial TimesFAS Apps
- Datos de 2024: caída de producción y cabaña porcina: swineweb.com
- Visión de expertos sobre consumo y recomendación de eficiencia: Reuters
- Tendencias hacia sostenibilidad en alimentación e impacto ambiental: journal.hep.com.cn
