El aumento del nivel del mar en las costas no solo amenaza a las poblaciones, sino que también supone un peligro para los cultivos agrícolas, que podrían verse dañados por el aumento de la salinidad.
por la Universidad de Nueva York
En respuesta, los investigadores han buscado mejorar la tolerancia de las plantas a la salinidad.
Nueva investigación sobre la resiliencia de los manglares
En un artículo recientemente publicado, un equipo internacional de científicos informa sobre la identificación de rasgos celulares que son fundamentales para tolerar la inundación de agua salada, un hallazgo que potencialmente ofrece nuevas vías para crear plantas que puedan sobrevivir en entornos hostiles.
La investigación, que aparece en la revista Current Biology , se centra en los árboles de manglares, plantas que crecen a lo largo de zonas costeras tropicales y subtropicales donde abunda el agua salada.
«Este trabajo revela que sólo unos pocos rasgos celulares simples son fundamentales para tolerar las condiciones extremas que experimentan algunas de las plantas más distintivas y resilientes del mundo», dice Adam Roddy, profesor adjunto del Departamento de Estudios Ambientales de la Universidad de Nueva York y uno de los autores del artículo.
Adaptaciones celulares en los manglares
La capacidad de los manglares —que han evolucionado casi 30 veces en los últimos 200 millones de años— para sobrevivir en agua salada es bien conocida. Sin embargo, no se ha aclarado qué componente de su composición celular explica su durabilidad en estas condiciones.
Para explorar este asunto, el equipo de investigación, que también incluyó a científicos de la Universidad de Guangxi, la Universidad Internacional de Florida y la Universidad Estatal de San Francisco, analizó 34 especies de manglares y más de 30 organismos estrechamente relacionados de 17 familias de plantas. El análisis, que también consideró la evolución de estas especies a lo largo del tiempo, incluyó especies tanto costeras como continentales.
Los resultados mostraron que, en comparación con sus parientes del interior, los manglares presentan células inusualmente pequeñas y paredes celulares más gruesas, lo que, en conjunto, proporciona la mayor resistencia mecánica necesaria para tolerar el agua salada y, al mismo tiempo, prevenir el marchitamiento. Más específicamente, las especies que pueden vivir en hábitats costeros salinos han desarrollado repetidamente células más pequeñas y resistentes.
Implicaciones para la ingeniería de cultivos en el futuro
Los manglares son conocidos por exhibir diversas adaptaciones interesantes y complejas a las inundaciones saladas, como la eliminación de grandes cantidades de sal de sus tejidos o incluso la absorción de sal para luego secretarla, explica el coautor Guo-Feng Jiang, de la Universidad de Guangxi. Si bien cada una de estas adaptaciones es fascinante, el estudio de la amplitud de la biodiversidad a menudo revela que la naturaleza ofrece soluciones sencillas a desafíos complejos.
«Estos resultados también apuntan a una estrategia prometedora para diseñar plantas tolerantes a la sal: manipular el tamaño de las células y las propiedades de la pared celular», añade Roddy.
Más información: La evolución convergente del tamaño celular permite la adaptación al hábitat de los manglares, Current Biology (2025). DOI: 10.1016/j.cub.2025.11.036 . www.cell.com/current-biology/f … 0960-9822(25)01543-X
