Compañía química global lanza cultivo de cáñamo industrial en Bélgica para la fitorremediación de tierras


Demanda por contaminación del suelo por cientos de millones de euros obliga a replantearse todos los beneficios del cannabis


3M, anteriormente conocida como Minnesota Mining and Manufacturing Company, es una empresa química global estadounidense con una planta en Zwijndrecht, Bélgica, en la región flamenca. La compañía produce productos para las industrias automotriz, eléctrica y de atención médica, incluidos varios medicamentos innovadores con propiedades inmunomoduladoras. El año pasado, los ingresos del grupo ascendieron a 35.400 millones de dólares estadounidenses, pero 2022 resultó ser un gran fracaso. Según Bloomberg, los cuellos de botella en la cadena de suministro, el aumento de los costos y las fluctuaciones en el tipo de cambio han afectado negativamente la rentabilidad. En julio, el grupo anunció que se desharía de su división de salud, que representa casi una cuarta parte de su facturación, y rebajó sus previsiones de beneficios para este año.

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Además, la empresa está incurriendo en pérdidas millonarias: Zwijndrecht 3M debe pagar unos 571 millones de euros para limpiar el suelo contaminado en Flandes y evitar la propagación de sustancias PFAS por toda la región. Esta es la conclusión del Comité de Investigación del Parlamento Flamenco después de una investigación y análisis de sangre de los residentes locales que viven en un radio de 5 kilómetros alrededor de la planta.

PFAS es el nombre colectivo de unos 4000 productos químicos difíciles de descomponer. Estos químicos, que las personas pueden ingerir en el agua o alimentos como el pescado, exponen la salud a efectos negativos como el debilitamiento del sistema inmunológico.

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Como resultado, la empresa química 3M en Zwijndrecht se vio obligada a detener temporalmente todos los procesos de producción que emiten PFAS a instancias de la autoridad medioambiental flamenca.

Para resolver la situación, la empresa acordó con los agricultores locales iniciar un proyecto para cultivar cáñamo industrial con el objetivo de que los agricultores reciban dinero por el cultivo, y la empresa mejorará el suelo y demostrará un compromiso con las prácticas agroindustriales sostenibles. La empresa quiere procesar fibras de cáñamo en textiles, materiales aislantes y otros productos.

Ya se han sembrado seis campos de prueba alrededor de Zwijndrecht. Las semillas fueron proporcionadas por la empresa agrícola Fytolutions. Según la compañía de semillas, los estudios han demostrado que el cáñamo puede absorber toxinas como plomo, mercurio e incluso desechos radiactivos del suelo en áreas contaminadas por plantas de energía nuclear.

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El cultivo es excelente para la fitorremediación, ya que las raíces penetran en la profundidad del suelo hasta 70 centímetros y absorben sustancias nocivas sin dañar la planta misma. El cáñamo industrial crece rápidamente incluso en los suelos más secos y contaminados.

Si el proyecto tiene éxito, 3M necesitará reclamar menos tierra, ahorrando costos a la empresa. Por lo tanto, la empresa paga el proyecto en su totalidad.