En agosto, cuando comienza la cosecha de manzanas, es momento de hablar sobre la deficiencia de potasio en los manzanos. Este elemento juega un papel clave en el desarrollo del árbol, y su deficiencia puede afectar gravemente la cosecha. Existe una alta probabilidad de que las manzanas se agrien y presenten costras. Veamos cómo reconocer el problema, por qué ocurre y cómo solucionarlo. Es importante distinguir la deficiencia de potasio en los manzanos de las enfermedades y plagas.
El potasio es responsable de la resistencia a las enfermedades, la calidad de la fruta y la resistencia al invierno. Si hay escasez, el manzano presenta las siguientes señales:
1. Hojas cambiantes
Quemadura marginal: los bordes de las hojas se vuelven amarillos, luego se vuelven marrones y se secan (como si se quemaran).
Rizado: las hojas se curvan hacia arriba o hacia abajo.
Aparecen pequeñas manchas (inclusiones oxidadas o marrones) entre las venas.
2. Problemas con las frutas
Las manzanas son pequeñas, ácidas y no tienen buen color.
Caída de frutos antes de madurar.
Deterioro de la vida útil: las frutas se echan a perder rápidamente durante el almacenamiento.
3. Depresión general del árbol
Crecimiento lento de los brotes.
Resistencia reducida a las heladas: las ramas se congelan en invierno.
Si no se repone la deficiencia, el manzano a menudo sufrirá de sarna y mildiú polvoroso, y el rendimiento disminuirá en un 30-50% y los brotes jóvenes se congelarán en invierno.
¿Por qué se produce la deficiencia de potasio? Quizás tenga suelos pobres: los arenosos y franco arenosos no retienen bien el potasio, o un exceso de calcio y magnesio (por ejemplo, con un encalado excesivo). Por otro lado, el manzano ha sufrido una sequía y, sin agua, las raíces no absorben el potasio. La sobrefertilización con nitrógeno altera el equilibrio de nutrientes.
Cómo alimentar un manzano: fertilizantes de potasio
Fertilizantes minerales. ¡El sulfato de potasio (K₂SO₄) es la mejor opción! Sin cloro, apto para todo tipo de suelos. Dosis recomendada: 20-30 g por 1 m² de circunferencia del tronco.
Sulfato de potasio y magnesio (K₂SO₄ + MgO): si también hay deficiencia de magnesio. Dosis: 25-40 g por 1 m². Monofosfato de potasio (KH₂PO₄): de acción rápida, pero caro. Funciona bien como fertilizante foliar (10 g por 10 l de agua).
El cloruro de potasio (KCl) contiene cloro, que es perjudicial para los manzanos, por lo que es mejor no utilizar este fertilizante en este caso.
De los materiales orgánicos es adecuada la ceniza de madera (100-200 g por 1 m²).
Cuándo aplicar fertilizantes de potasio para los manzanos
En primavera (abril-mayo) – para el crecimiento y la floración.
En verano (julio-agosto), durante el periodo de llenado y maduración de los frutos. Cabe destacar que agosto es una época excelente para la fertilización con potasio, ya que las manzanas adquieren mayor dulzor y mejor color. El potasio aumenta la resistencia al invierno (el árbol acumula azúcares, fortalece la corteza y tolera mejor las heladas).
En otoño (septiembre): para aumentar la resistencia al invierno.
¡Importante! El potasio se absorbe mal en el suelo, por lo que se debe incrustar a una profundidad de 10-20 cm. Si los síntomas ya son evidentes, se utiliza la fertilización foliar (en las hojas). Utilice monofosfato de potasio (1%) o infusión de ceniza (200 g de ceniza por cada 10 l, dejar reposar 24 horas).
Cómo distinguir la deficiencia de potasio en el manzano de otros problemas
La deficiencia de potasio en los manzanos suele manifestarse con síntomas similares a enfermedades fúngicas, quemaduras o falta de otros elementos. Algunos jardineros, por error, empiezan a tratar el árbol para combatir infecciones, aunque en realidad simplemente carece de potasio. Veamos con qué se puede confundir la deficiencia de potasio y cómo distinguirla.
Quemaduras marginales de las hojas frente a enfermedades fúngicas
Deficiencia de potasio. Los bordes de las hojas se amarillean, luego se tornan marrones y se secan (como si se hubieran quemado). El daño comienza en las hojas inferiores viejas. No hay zonas con límites definidos (como en el caso de los hongos).
Enfermedades que se confunden con
- Sarna: aparecen en las hojas manchas de color marrón oliva con una capa aterciopelada, luego las hojas se secan y se caen.
- Quemadura monilial: las hojas de repente se vuelven marrones y se secan, pero esto suele ocurrir en la primavera después de la floración.
- Quemadura bacteriana: las hojas se vuelven negras, se enrollan, pero permanecen en las ramas (si hay una deficiencia de potasio, se caen).
¿Cómo diferenciarlos? Con hongos patógenos, las manchas se extienden por toda la placa, no solo por los bordes. La deficiencia de potasio no se trata con fungicidas.
Rizado de las hojas frente a virus y plagas
Deficiencia de potasio. Las hojas se curvan hacia arriba o hacia abajo, pero sin deformación ni hinchazón. Sin recubrimiento pegajoso, membranas ni insectos.
Problemas que se confunden con
- Pulgones: las hojas se curvan formando un tubo y en su interior se pueden ver pequeños insectos.
- Enfermedades virales (por ejemplo, mosaico): las hojas se deforman y aparecen patrones amarillos.
- Orugas enrolladoras de hojas: las hojas están pegadas entre sí con telarañas y las plagas viven en el interior.
¿Cómo saberlo? Examina el dorso de la hoja: si no hay plagas, lo más probable es que se trate de falta de potasio.
Hojas amarillentas vs. deficiencia de magnesio o hierro
Deficiencia de potasio. Los bordes de las hojas se amarillean y se secan, para luego volverse marrones. Las hojas viejas de la parte inferior de la corona se ven afectadas.
Otros tipos de clorosis. Deficiencia de magnesio: amarilleamiento entre las nervaduras, seguida de manchas marrones. Deficiencia de hierro: las hojas jóvenes se amarillean en la parte superior, pero las nervaduras permanecen verdes.
¿Cómo diferenciarlas? Con una deficiencia de potasio, las hojas inferiores sufren primero; con una deficiencia de hierro, las superiores. La clorosis magnésica produce un patrón marmóreo, mientras que la clorosis potásica produce una quemadura marginal.
Frutos pequeños y ácidos vs. falta de boro o fósforo
Deficiencia de potasio. Las manzanas son pequeñas, de color apagado y ácidas. Puede producirse una caída prematura de la fruta.
Falta de boro: los frutos se deforman y aparecen manchas corchosas.
Deficiencia de fósforo: las manzanas son pequeñas pero dulces, y sus hojas tienen un tono morado. ¿Cómo diferenciarlas? Con una deficiencia de potasio, el sabor y la conservación se ven afectados, y con una deficiencia de boro, la forma de la fruta.
