El diagnóstico oportuno es importante para una alta productividad en la producción porcina. Si se produce una cojera, las causas deben identificarse y corregirse lo más rápido posible desde el punto de vista del bienestar animal y económico.
El veterinario en ejercicio Dr. Torsten Pabst compartió su consejo en un artículo publicado en Agrarheute.com.
“Hay muchas causas de cojera en los cerdos y la pérdida económica es enorme. Las deficiencias en el entorno del alojamiento o en la alimentación deben identificarse y corregirse rápidamente. El mal estado de las patas de los cerdos de engorde tiene un impacto directo en el rendimiento del sacrificio, por ejemplo, las ganancias diarias más bajas y la baja conversión alimenticia darán lugar a posibles deducciones de la canal. En las cerdas, las extremidades sanas son literalmente la base de una alta productividad biológica. En última instancia, la cojera siempre se asocia con pérdidas económicas.
El veterinario debe prestar atención a las pezuñas y espolones. Cuando se trata de una uña saludable, la nutrición juega un papel central aquí. La vitamina biotina soluble en agua es esencial para el desarrollo de cuernos firmes y resistentes. Además, el cobre (Cu), los aminoácidos que contienen azufre (cistina y metionina), el manganeso (Mn) y el zinc (Zn) son necesarios para la formación de queratina y, por lo tanto, para el crecimiento saludable del tejido córneo. La deficiencia de estas sustancias está plagada de grietas e inflamación.
Por lo tanto, el cuidado de las pezuñas debe ser parte del estándar para una granja porcina exitosa. Los cascos deben revisarse al menos una vez por ciclo de cría y recortarse si es necesario. Los espolones se eliminan mediante cirugía. De lo contrario, volverán a crecer, se desprenderán, se inflamarán y causarán serios problemas hasta la muerte de la cerda.
En el caso de cojera en cerdos, realice una investigación exhaustiva. ¿Hay signos de lesión, inflamación de las articulaciones y cuál es el estado del casco? ¿Se puede tratar la cojera terapéuticamente?
Si las lesiones son el principal problema, verifique el bienestar animal. ¿Qué tal un piso estable? ¿Pueden resbalar? ¿Los animales tienen situaciones estresantes por conflictos, por ejemplo, durante la alimentación? ¿La comida es balanceada? Muy poco fósforo en el alimento interrumpe el crecimiento óseo, lo que lleva a la osteocondrosis. Comprueba que el pienso tenga los valores adecuados de fósforo, calcio y D3.
Una autopsia, es decir, un examen anatómico patológico, proporciona la mejor visión general de la cojera. Los animales clínicamente enfermos deben seleccionarse para este fin. Las articulaciones, por ejemplo, pueden examinarse en busca de inflamación o deformidad. En el caso de articulaciones gruesas, busque patógenos como estreptococos o micoplasmosis. Recuerda que una higiene minuciosa en la pocilga es fundamental para prevenir infecciones bacterianas. Sin esperar al sacrificio, se pueden tomar muestras de articulaciones visiblemente hinchadas en cerdos enfermos con un aspirador articular”.
(Fuente: www.agrarheute.com. Autor: Dr. Thorsten Pabst.