La nueva especie, Lampromeloe pantherinus, pertenece al grupo de los meloidos o cantáridas y se encuentra en el norte de África
MNCN-CSIC/DICYT Gracias a un equipo de investigación formado por el Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) y el Instituto de Estudios Ceutíes, Lampromeloe pantherinus ya forma parte de las especies descritas por la ciencia. Se trata de un coleóptero perteneciente al grupo de los meloidos o cantáridas que se encuentra únicamente en el norte de África. Los investigadores están estudiando la distribución de la diversidad genética de las especies del género Lampromeloe utilizando análisis de ADN y de la morfología de los ejemplares. Mediante esta aproximación han descubierto y descrito a la nueva especie cuyo ejemplar tipo, el que ha servido para nombrarla, se ha depositado en la colección de Entomología del MNCN.
La especie protagonista de este estudio se caracteriza por su llamativo tegumento, parte de los artrópodos que comprende la cutícula y la epidermis, de aspecto metálico, que exhibe una combinación de tonos verdosos, violetas, y negros; y por su voluminoso abdomen. Cabe destacar que el nombre de la especie, Lampromeloe pantherinus, fue elegido en honor al género de los grandes felinos (Panthera), en conmemoración al último león de Berbería conocido en Marruecos en estado salvaje, que fue abatido en 1942 en el puerto de montaña Tizi n’ Tichka, el mismo lugar donde se colectó el holotipo de esta nueva especie. Se localiza en la Cordillera del Atlas, concretamente en algunas localidades de Argelia, Marruecos y Túnez. Suelen vivir en espacios abiertos como pastos de montaña, límites de bosques y zonas agrícolas. Al preferir las condiciones climáticas típicas de las áreas de montaña, son especialmente vulnerables a los efectos del cambio climático.
“Los escarabajos del género Lampromeloe son especies del grupo de los meloidos, también conocidos como cantáridas o aceiteras, que se caracterizan por expulsar cantaridina, un veneno con aplicaciones en farmacología, como estrategia de defensa”, explica Alberto Sánchez-Vialas, investigador del MNCN. “Dentro de este género, se consideraba que existían tan solo dos especies en el Paleártico Occidental, Lampromeloe variegatus y Lampromeloe cavensis, las cuales se encuentran ampliamente distribuidas en Europa y algunas zonas del norte de África, Asia y la península arábiga. Precisamente, la gran capacidad para dispersarse a larga distancia de estos escarabajos durante su estadio larvario, motivó nuestro interés en analizar su compleja distribución genética”, añade el investigador.
El trabajo experimental consistió en análisis filogeográficos, es decir, de la distribución geográfica de la diversidad genética. Para ello, se emplearon marcadores genéticos mitocondriales complementados con revisiones de la morfología de los organismos. “Los resultados muestran que las poblaciones de Lampromeloe variegatus de Europa y del norte de África constituyen, en realidad, dos especies diferentes. Sin embargo, a pesar de ser distintas, Lampromeloe variegatus y Lampromeloe pantherinus están estrechamente emparentadas y morfológicamente tan solo se diferencian por la estructura de los élitros (alas anteriores endurecidas), y por la forma de los genitales masculinos”, revela la investigadora del MNCN Estefany Karen López-Estrada. “Esta investigación ayuda a aclarar la compleja taxonomía de este grupo tan interesante, pero todavía es necesario seguir trabajando para determinar la diversidad genética de otras poblaciones del grupo”, concluye Mario García París, también del MNCN.