El gobierno mexicano ha prohibido el uso, producción, venta e importación de 35 plaguicidas clasificados como productos fitosanitarios de alto riesgo como parte de un esfuerzo continuo para garantizar prácticas agrícolas más seguras y sostenibles tanto para los trabajadores agrícolas como para los consumidores.
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, afirmó que la decisión refleja el compromiso asumido a finales de marzo de prohibir el uso de diversos plaguicidas que permanecen en el mercado, a pesar de estar prohibidos en varios países debido a su impacto negativo en la salud humana y el medio ambiente. La medida se implementó mediante un esfuerzo coordinado entre la Secretaría de Salud (SS), a través de la COFEPRIS, la Secretaría de Economía (SE), la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), según informó Mexico Business News.
Julio Berdegué, ministro de la SADER, explicó que las 35 sustancias prohibidas están incluidas en acuerdos internacionales de los que México es parte, incluyendo los Convenios de Basilea, Estocolmo y Róterdam. «El objetivo es establecer regulaciones mucho más estrictas, ya que estos productos no pueden usarse como la aspirina. Estos esfuerzos forman parte de una estrategia más amplia para lograr una agricultura más limpia, sostenible y segura tanto para los productores como para los consumidores», afirmó.
Los pesticidas prohibidos incluyen aldicarb, un insecticida usado en cultivos de cítricos y caña de azúcar que representa un riesgo para la salud a través del contacto directo; carbofurano, usado en cultivos de café, cítricos, aguacate y algodón y ya prohibido en Canadá y Europa; endosulfán, usado en cultivos de maíz, algodón y frutales y prohibido en 50 países debido a sus efectos sobre el crecimiento físico, el sistema nervioso y el desarrollo cerebral de los bebés; y DDT, prohibido en la mayor parte del mundo desde la década de 1970, pero que todavía se produce y usa en México.
Berdegué destacó que este decreto marca un hito histórico, ya que la última regulación similar se emitió en 1991 y abarcaba únicamente 21 sustancias activas. Añadió que el gobierno mexicano seguirá implementando medidas para eliminar gradualmente las sustancias incompatibles con los principios de la agricultura sostenible. La segunda lista de plaguicidas prohibidos se publicará en 2026 y la tercera en 2027.
Tras el anuncio, la FAO felicitó al gobierno mexicano en redes sociales: «Agradecemos a la presidenta Claudia Sheinbaum y al ministro Julio Berdegué por el decreto que prohíbe 35 plaguicidas de alto riesgo. Han pasado 34 años desde que México adoptó una medida tan importante. Este es un paso importante hacia una agricultura sostenible y segura».
Por otro lado, la Red de Acción en Plaguicidas y Alternativas en México (RAPAM) calificó la medida como un paso tímido, explicando que los plaguicidas prohibidos son en su mayoría sustancias obsoletas. La organización señaló que más de 200 productos agroquímicos sujetos a restricciones en otros países permanecen intactos, incluyendo el etil clorpirifos, un plaguicida que puede afectar el desarrollo neurológico infantil.
RAPAM también denunció el uso continuo de fipronil y neonicotinoides, a los que grupos ambientalistas atribuyen la alta mortalidad de las abejas, así como del paraquat, un herbicida vinculado a la enfermedad de Parkinson y prohibido en 72 países. La organización también destacó el caso del glifosato, un controvertido herbicida que el expresidente Andrés Manuel López Obrador intentó prohibir por decreto, pero que fue derogado tras la disputa de México con Estados Unidos sobre el tratado comercial T-MEC. RAPAM finalmente instó al ministro Berdegué a involucrar a un espectro más amplio de actores, en particular a las organizaciones rurales y campesinas, en el desarrollo de futuras restricciones a los agroquímicos.
La lista de 35 pesticidas prohibidos por el decreto incluye: 2,4-DB, alaclor, aldicarb, azafenidina, azinfos-metil, azociclotina, bioresmetrina, bromuconazol, captafol, carbofurano, carbosulfán, clordano, clorpirifos-metil, DDT, diclofop-metil, dinocap, dinoseb, disulfotón, edifenfos, endosulfán, fenarimol, fenitrotión, fentión, fentoato, flusilazol, fosfamidón, hexaclorociclohexano, hexaflumurón, lindano, metidatión, óxido de fenbutatín, paratión-etilo, quinalfos, resmetrina y triclorfón.
Fuente: Mexico Business News.
