La firma planeaba lanzar su planta procesadora de soya este año, pero no pagó a tiempo a sus proveedores de frijol.
El colapso de los ambiciosos planes del procesador de soja fue descrito por Chris Clayton, editor de políticas del portal DTN Ag, en un artículo de la revista agrícola digital www.dtnpf.com.
“Global Processing, con sede en Iowa, ha estado procesando soja orgánica y sin OGM para clientes nacionales y exportaciones a Asia. A la empresa ya no se le permite aceptar soja en Iowa y Nebraska después de que cada estado aprobara una acción sobre las licencias de comercio de granos a principios de este mes. El lunes 24 de octubre, Global Processing se declaró en quiebra en Iowa, aunque el comienzo del año parecía prometedor para la firma.
En mayo de 2021, Global Processing anunció una asociación con Missouri Soybean Merchandising Board para otorgar licencias y comercializar soja con alto contenido de ácido oleico SOYLEIC a los agricultores de Iowa, Kansas, Kentucky, Missouri y Nebraska. El acuerdo permitió a Global Processing ampliar su negocio y su gama de soja comprada. También en mayo, la firma emitió un comunicado de prensa anunciando que había llegado a un acuerdo para comprar una planta de procesamiento de soja en Minnesota y planea tenerla en pleno funcionamiento para diciembre de 2022.
Pero luego algo salió mal, y el 7 de octubre, el Departamento de Agricultura y Administración de Tierras de Iowa anunció que el estado había suspendido las licencias de almacenamiento y comercialización de granos de Global Processing «debido a la falta de fondos suficientes de la compañía para cubrir los cheques de los productores de granos y la falta de presentar estados financieros mensuales» de acuerdo con los requisitos de Iowa.
El 12 de octubre, la Comisión de Servicios Públicos de Nebraska (PSC) anunció que Global Processing renunció a su licencia comercial de granos de Nebraska luego de una auditoría realizada por el Departamento de Granos de PSC que también encontró que Global Processing no tenía fondos suficientes para cubrir sus compras de granos de soja. estado.
En su declaración de bancarrota, Global Processing enumeró sus activos y pasivos que van desde $ 10 millones a $ 50 millones. Un abogado de Global Processing se negó a comentar sobre la quiebra, excepto que la empresa está reestructurando sus deudas. En enero pasado, un tribunal estadounidense de quiebras en Delaware ordenó a Global Processing Inc. pague a Pipeline Foods $1.6 millones por 1,000 toneladas métricas de soya orgánica que Global Processing acordó comprarle a Pipeline.
David M. Wilcox, figura como presidente de Global Processing Inc. se declaró en bancarrota, anteriormente había tenido problemas con la ley y se declaró culpable en el Tribunal de Distrito de los EE. UU. en Minnesota en 2016 por hacer afirmaciones falsas en una solicitud de préstamo de la Administración de Pequeñas Empresas (SBA). Inicialmente, Wilcox fue acusado de fraude bancario y declaraciones falsas, pero estos cargos fueron desestimados. En 2018, Wilcox fue sentenciado a tres años de libertad condicional y $1.347 millones en restitución a la SBA y al Bank of Minnesota».
(Fuente: www.dtnpf.com. Autor: Chris Clayton. Foto cortesía).
