Muchos de los principales cultivos alimentarios del mundo son polinizados por el viento. Esta lista incluye arroz, centeno, cebada, avena y maíz. Debido a que el viento no es preciso, los cultivos polinizados por él deben liberar una tonelada de polen durante el período de floración, que dura varias semanas, para aumentar sus posibilidades de una polinización exitosa. Aunque las flores de estos granos son visualmente poco atractivas para las abejas en comparación con la mayoría de las plantas, las relaciones son interesantes. En Aragón, España, se ha lanzado un proyecto que combina cebada, abejas y plantas melíferas.
Cerveza y miel irán de la mano gracias a CEREAPI, un proyecto único para plantar cebada para la producción de cerveza y plantas melíferas para que las abejas puedan producir miel, informa el portal español agroinformacion.com.
Un nuevo proyecto, que tiene como objetivo desarrollar, evaluar e implementar un modelo de gestión sostenible que combine la apicultura con el cultivo de cebada, se está implementando en una finca experimental ubicada en Tabernas de Izuela (Huesca, Aragón). Aquí es donde los científicos buscarán un equilibrio entre los cultivos y los insectos polinizadores.
El objetivo es nada menos que plantar plantas melíferas que mejoren el hábitat de los insectos polinizadores así como la biodiversidad del entorno agrícola. Para ello se desarrollarán mezclas de especies de plantas melíferas, que también mejorarán la salud del suelo, y se cultivarán en las afueras de las tierras cerealistas destinadas a la producción de cebada para elaboración de cerveza.
El trabajo y el interés de las abejas por las plantas de cebada y melífera serán comprobados por expertos de la Asociación de Apicultores ARNA, y especialistas en el cultivo objetivo sacarán conclusiones sobre el impacto de la práctica en la calidad de una cerveza que cumpla con los valores ambientales. sostenibilidad. Por este motivo, se ha sumado a la alianza Cervezas Ambar, empresa aragonesa con una larga trayectoria en el mundo de la cerveza y experiencia en la elaboración de bebidas con etiqueta ecológica.
Para obtener datos fiables y precisos, el proyecto prevé realizar un seguimiento exhaustivo de diversos factores como la floración, la mejora biológica del suelo o parámetros específicos relacionados con el secuestro de carbono y la resistencia de las plantas melíferas al estrés abiótico.
Además, en 2027, los productores de cebada cervecera y la industria maltera, los agricultores y apicultores que trabajan con las prácticas CEREAPI tendrán su propio sello que resaltará el valor agregado de sus productos a través del cumplimiento de los principios de sostenibilidad.
Fuente: agroinformacion.com