Las ONG medioambientales impugnan la aprobación del glifosato ante el Tribunal Europeo.
El glifosato ha sido motivo de controversia desde que la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer lo clasificó como «probablemente cancerígeno para los humanos» en 2015. Según la legislación de la UE, debería prohibirse el uso de pesticidas con esta clasificación de peligro. Sin embargo, las evaluaciones de riesgos de la UE para 2017 y 2023 concluyeron que el glifosato no representa un riesgo significativo para la salud, lo que le permite seguir siendo uno de los herbicidas más utilizados en Europa y en todo el mundo.
El miércoles 11 de diciembre, la Red Europea de Acción contra los Plaguicidas y sus miembros ClientEarth, Générations Futures, GLOBAL 2000, la Red de Acción contra los Plaguicidas de Alemania y la Red de Acción contra los Plaguicidas de los Países Bajos impugnaron la aprobación del glifosato por parte de la Unión Europea ante el Tribunal de Justicia Europeo.
Las organizaciones presentaron un análisis científico y jurídico al Tribunal Europeo, concluyendo que existían graves deficiencias en la evaluación de la aprobación del glifosato en la Unión Europea.
La Comisión Europea y las agencias científicas de la Unión Europea ignoraron sistemáticamente estudios científicos críticos que informaban sobre los efectos nocivos del glifosato, dijeron las organizaciones. Según la Red Europea de Acción contra los Plaguicidas, para lograrlo se utilizaron argumentos sin fundamento científico.
Los efectos nocivos informados en los estudios se minimizaron, por ejemplo, mediante el uso de metodologías estadísticas menos sensibles e inapropiadas. Al hacerlo, las autoridades europeas violaron sus propias directrices y protocolos internacionales.
La conclusión de la Comisión Europea de que el glifosato es seguro, según la Red Europea de Acción contra los Plaguicidas, es científicamente infundada y es el resultado de una evaluación de riesgos que no cumple con los requisitos legales clave. Por ello, la red solicita la intervención del Tribunal.
Antoine Bayeux, abogado de la coalición de ONG, comenta: “La Comisión tiene cierta discrecionalidad a la hora de gestionar los riesgos asociados con la aprobación de sustancias activas utilizadas en pesticidas. Sin embargo, existen límites a tales poderes discrecionales. Según la jurisprudencia establecida, la evaluación de riesgos debe, por ejemplo, cumplir con los principios de excelencia, transparencia e independencia. Creemos que la evaluación del glifosato no cumplió con estos estándares de calidad.
Por eso vamos a ir a los tribunales. Las ONG en este caso son Pesticide Action Network (PAN) Europa y sus miembros ClientEarth, Générations Futures, GLOBAL 2000, Pesticide Action Network Germany y Pesticide Network Netherlands. Son una coalición diversa de defensores del medio ambiente y la salud que trabajan para proteger a las personas y al planeta de los pesticidas dañinos. Están comprometidos a promover alternativas sostenibles a la agricultura con uso intensivo de productos químicos y a responsabilizar a los responsables de la toma de decisiones del cumplimiento de las leyes de la UE. El trabajo en el caso también fue posible gracias al apoyo de numerosas organizaciones e individuos”.
Fuente: Red de Acción sobre Plaguicidas (PAN) Europa.