Los precios suben: Brasil, el mayor proveedor de café del mundo, se está quedando sin existencias. Las expectativas de los amantes del café de que su bebida favorita será más barata en 2025 no se harán realidad, dice un analista del mercado brasileño del café.
Los amantes del café todavía tendrán que pagar un alto precio por una taza de bebida tonificante, según una entrevista con un experto de la revista brasileña AgriBrasilis. Eduardo Carvalhaes es socio de Escritório Carvalhaes – Corretores de Café, una consultora que actúa en las áreas de servicios de intermediación, informes de mercado, aprobaciones de muestras y suministros, y brinda servicios relacionados con la exportación de café.
AgriBrasilis. ¿Qué provocó el aumento de los precios del café?
Carvalhaes. Puedo mencionar dos factores: el crecimiento del consumo mundial (alrededor del 1,5% anual) y los problemas climáticos globales. Los precios siguen altos debido a las preocupaciones sobre la oferta limitada para la próxima temporada. En los últimos años, los problemas climáticos en los principales países productores han provocado una disminución de los niveles de existencias de seguridad. Esta disminución también se debe a las fuertes exportaciones y la demanda de los consumidores. Por ejemplo, la peor helada en Brasil en el siglo XX ocurrió en 1975, lo que provocó cambios en el cultivo de café local cuando los cafetaleros de Paraná y algunos de São Paulo trasladaron sus actividades a Minas Gerais. Los precios subieron bruscamente en los dos años siguientes, batiendo récords establecidos en 1977 en la bolsa de valores. En ese momento, en Brasil teníamos buenas reservas, incluidas reservas gubernamentales. Esta pausa en la cosecha fue un gran beneficio para nuestros competidores en el resto del mundo porque era un problema local, sólo en Brasil. Aunque se trataba de un problema local, los precios subieron porque ya éramos el mayor exportador del mundo (lo que ha sido así desde finales del siglo XIX).
Comparemos este ejemplo con la situación actual: Brasil sigue siendo el mayor productor de café del mundo. Pero a diferencia de 1975, los problemas climáticos ahora son globales. África, un importante productor de café, tiene problemas climáticos que afectan la producción. Vietnam, el segundo mayor productor de café robusta del mundo, también enfrenta desafíos climáticos.
Todo el mundo esperaba una mejor cosecha en Brasil en 2024, pero tuvimos un período seco en enero-marzo con temperaturas muy altas, lo que provocó que creciera menos fruta. La información apunta a una caída significativa del volumen para la próxima cosecha de café de 2025 en Brasil, el mayor productor y exportador de café y el segundo consumidor del mundo. Colombia también tuvo problemas debido al exceso de lluvias durante la temporada.
Es imposible predecir cómo se comportarán los precios del café en 2025. Hay tantas variables que es casi imposible saber el resultado de todas ellas. Cualquiera que diga saber lo que va a pasar está muy equivocado, pero creo que las fluctuaciones continuarán. La tónica de 2024 fueron las fuertes fluctuaciones en el mercado, donde cualquier variable nueva hacía que el mercado subiera y bajara muy repentinamente, pero durante un período de tiempo más largo, los precios subieran. Los operadores del mercado de valores no imaginaban tal crecimiento.
La base de todo este problema del precio del café es que nos estamos quedando sin café. Anteriormente, antes de los años 2000, trabajábamos con existencias muy grandes de café. Esto era conveniente para los clientes porque cuando surgían problemas en las cosechas, había café disponible, aunque a veces el café no era de la mejor calidad.
En cuanto a la cosecha, quienes trabajan en el sector productivo siempre dicen que las cifras de la Conab – Empresa Brasileña de Abastecimiento son exageradas y subestiman sus estimaciones. Mientras tanto, los compradores están inflando las cifras. Un lado subestima 5 millones de bolsas, el otro lado exagera 5 millones. El resultado final es siempre una cifra de Conab en algún punto intermedio. Nuestros suministros se acercan a los 50 millones de sacos.
Brasil ha pasado de producir 20 millones de sacos de café en 1999 a casi 50 millones en la actualidad. Sin embargo, nuestras existencias de seguridad se agotaron en 2017 y Brasil ahora depende de su producción anual. Brasil ocupa el primer lugar en el mundo en investigación sobre café. Somos los más eficientes en términos de calidad. En la mente del consumidor, el mejor café proviene de Colombia y Centroamérica, pero este escenario está cambiando.
Tenemos otra característica respecto a otros productores de café, en pocas palabras, el mayor comprador de café de Brasil es Brasil. Por ejemplo, Estados Unidos es el mayor importador, seguido de Alemania, pero nuestro mayor consumo es local, lo que garantiza una mayor estabilidad para nuestra producción de café. Brasil consume alrededor de 22 millones de sacos al año, una estimación conservadora.
Fuente: agribrasilis.com
