Luxemburgo, el primer país de la Unión Europea en prohibir la comercialización de productos a base del herbicida glifosato, deberá volver a autorizar la venta del herbicida tras una sentencia judicial.
Así lo informó un comunicado del Ministerio de Agricultura, Viticultura y Desarrollo Rural de Luxemburgo.
En retrospectiva, el 1 de febrero de 2020, Luxemburgo retiró su autorización para comercializar glifosato, un químico ampliamente utilizado en productos fitosanitarios y potencialmente cancerígeno según la OMS y la comunidad ambiental. Sin embargo, el país en ese momento permitió la venta de las existencias existentes de productos de glifosato, y el 1 de enero de 2021 comenzó una prohibición total.
Bayer, fabricante del pesticida RoundUp a base de glifosato, apeló la decisión de Luxemburgo, argumentando que no se había seguido la ley europea. El pasado diciembre, la Comisión Europea extendió la autorización para el uso de glifosato en la UE hasta finales de 2023.
Así, la prohibición fue finalmente anulada por la decisión del Tribunal Administrativo de Luxemburgo, que señaló la «falta de indicación del más mínimo argumento legal» para la prohibición de 8 productos afectados, incluido el glifosato, contra el régimen legal de la UE que permitía su distribución. .
El Ministerio de Agricultura de Luxemburgo, en un comunicado este lunes, indicó que el levantamiento del veto da como resultado que «los permisos se restablezcan a partir de la fecha de la sentencia». El ministro de Agricultura, Claude Haagen, dijo que «tomó nota» de la decisión. «Luego de un análisis detallado del veredicto, el gobierno decidirá los próximos pasos, que serán comunicados en su oportunidad», dijo el ministro en un comunicado.
Los herbicidas a base de glifosato se utilizan principalmente en la agricultura y la horticultura para controlar las malas hierbas que compiten con los cultivos.
La campaña contra el glifosato comenzó cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una advertencia en 2015 sobre los riesgos cancerígenos del glifosato, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y la Agencia Europea de Sustancias Químicas (ECHA) dijeron más tarde que tenían datos científicos completamente opuestos para clasificar el herbicida como un producto no cancerígeno.
(Fuente: ma.gouvernement.lu).