Un brote de gusano cogollero en España debido a una primavera cálida amenaza el maíz y otros cultivos de este año. Las características de la plaga hacen que se alimente durante toda la temporada, por lo que los bioproductos cobran especial importancia debido a la ausencia de un período de espera antes de la cosecha.
La alimentación de las larvas de la primicia de invierno conduce al secado de las plantas, las áreas afectadas deben volver a sembrarse. Para combatir la plaga, se ha aconsejado a los agricultores que utilicen insecticidas tardíos y un uso más activo de productos biológicos, escribe el agroportal español Campo Galego.es : Además del maíz, las orugas de la pala de invierno destruyen cultivos de cereales, forrajes y hortalizas en algunas zonas, por lo que las parcelas deben volver a sembrarse.
La primicia de invierno es una plaga común, pero en condiciones normales causa daños puntuales a los cultivos. Sin embargo, esta temporada hubo un brote, especialmente en aquellos cultivos que se plantaron a finales de mayo.
Los expertos coinciden en la causa del brote: condiciones muy favorables para la conservación de una parte importante de los huevos y para la eclosión de las larvas: un invierno suave y luego una primavera húmeda. “Otras primaveras en marzo y abril son más frías y una proporción importante de los huevos y larvas terminan muriendo, mientras que este año el calor permitió que sobrevivieran más individuos”, explica José Manuel Medeiros, ingeniero agrónomo, ingeniero y gerente comercial de la cooperativa AIRA. .
Las larvas del gusano cortador de invierno de la tercera etapa viven en el suelo a una profundidad de 1 a 2 centímetros y se alimentan de la parte central del maíz en las primeras etapas de desarrollo. El ciclo de desarrollo del maíz y las larvas coincide en el tiempo, por lo que este cultivo es más susceptible al ataque de las orugas del gusano cogollero.
“En las plantas afectadas por larvas del gusano cortador de otoño en el cuarto y quinto estadio, los síntomas son fácilmente reconocibles: las plagas muerden el cuello, lo perforan desde el interior y trepan por la cavidad del tallo hasta cierta altura”, según un informe elaborado por el grupo de trabajo del Laboratorio Fitosanitario del Ministerio de Agricultura de España. Por lo tanto, las plantas parecen estar severamente marchitas y luego se secan si el ataque ocurre específicamente en las primeras etapas de crecimiento.
El maíz es muy sensible a la alimentación de larvas hasta el estadio de 6 u 8 hojas. Sin embargo, la primicia de invierno daña aún más en la temporada, afectando las raíces secundarias de «anclaje» del maíz y provocando el acame.
Los expertos aconsejan revisar constantemente el suelo junto al maíz en busca de larvas de gusano cogollero y comenzar a monitorear de inmediato si las encuentra.
Los pesticidas aprobados y más comunes para el control del gusano cogollero en el maíz son los insecticidas piretroides como la deltametrina o lambda-cihalotrina. Es necesario aplicar insecticidas de contacto contra esta plaga en las últimas horas del día, ya que el ciclo de actividad de las larvas también es nocturno. Si hay muchas larvas, se recomienda tratar con insecticidas, aunque el maíz ya tenga más de 8 hojas, para evitar ataques tardíos cuando las plagas infectan las raíces secundarias e interfieren con el establecimiento de una planta adulta. Se recomienda combinar los tratamientos con insecticidas con fertilizantes foliares para ayudar a que el maíz se recupere.
Los bioinsecticidas contra plagas de insectos están cobrando importancia en la lucha contra la «rosquilla de maíz». De los agentes de biocontrol, los productos con Bacillus thuringiensis , así como los nematodos entomopatógenos Steinernema fediae , han demostrado su eficacia contra las larvas del gusano cogollero , señalan expertos españoles.
Aunque los tratamientos biológicos para plagas se usan mayoritariamente en cultivos de hortalizas, dada la severidad estacional de los gusanos cortadores, tiene sentido aplicarlos al maíz para que el cultivo pueda alcanzar la madurez. Los productos de biocontrol, a diferencia de los insecticidas agroquímicos, no tienen períodos de espera que deban observarse. De lo contrario, el maíz para ensilaje, por ejemplo, tendrá que ser recolectado antes de tiempo, como ha sucedido antes en varias campañas de maíz en España”.
(Fuente y foto: www.campogalego.es).
