Plantar franjas de flores en un campo con al menos dos especies puede aumentar el número de enemigos naturales de las plagas en un 70 %. Cuantas más especies de flores, mejor el efecto, según un nuevo metaanálisis de la Universidad de Copenhague.
por la Universidad de Copenhague
Las franjas de flores a lo largo de campos y zanjas pueden quedar bien en el paisaje, pero ¿son realmente útiles? Este es un tema de debate frecuente. En los últimos años, se han popularizado tanto en Dinamarca como en el extranjero. Uno de los objetivos de las franjas es atraer más insectos depredadores que puedan controlar las plagas de forma natural en los campos, evitando así el uso de pesticidas. La UE se propone reducir el uso de pesticidas en un 50 % para 2030.
Un metaanálisis de la Universidad de Copenhague, publicado en Agriculture, Ecosystems & Environment, muestra que las franjas florales son eficaces si contienen dos o más especies de flores. El análisis revisó 24 estudios que incluyeron 382 ensayos que midieron los efectos de las franjas florales en la abundancia de enemigos naturales. El panorama general es claro.
«Nuestro estudio confirma que la diversidad es rentable. Cuantas más especies haya en la franja floral, más enemigos naturales habrá en el campo», afirma la autora principal del estudio, la profesora asociada Lene Sigsgaard, del Departamento de Ciencias Vegetales y Ambientales.
En general, los resultados sugieren que las franjas de flores con sólo dos especies diferentes aumentan el número de enemigos naturales en un promedio del 70%.
Tener una alta diversidad de especies es claramente beneficioso. Si solo se tiene una especie de flor, la diferencia no es significativa. Sin embargo, con solo dos especies, hay un 70 % más de enemigos naturales que sin flores.
«Y la abundancia de enemigos naturales aumenta un 4,1 % por cada nueva especie de flor que se añade», afirma Nika Jachowicz, autora principal del estudio y becaria de doctorado industrial en el Departamento de Ciencias Vegetales y Ambientales. El estudio forma parte del doctorado recientemente finalizado por Jachowicz.
La explicación probable es que las franjas florales multiespecíficas pueden alimentar a los enemigos naturales durante la temporada de crecimiento, ya que florecen en diferentes momentos. Además, las flores que más favorecen a los insectos benéficos varían.
«Puedes tener suerte de que una especie de flor prospere, pero si solo tienes una, todo depende de cómo crezca y de si se adapta a los insectos beneficiosos de ese campo. Es más vulnerable. Un mayor número de especies de flores ofrece mayor certeza de éxito y favorece una gama más amplia de insectos beneficiosos», afirma Lene Sigsgaard.
Más mariquitas y sírfidos
El metaanálisis demuestra que las franjas florales atraen principalmente a enemigos naturales que se alimentan de plantas, como mariquitas, chinches de las flores, escarabajos soldado, sírfidos y crisopas verdes. Este grupo de enemigos naturales se alimenta de pulgones, trips, arañas rojas, así como de huevos y larvas de diversas plagas.
Sin embargo, no es solo el número de especies en la franja lo que importa; también es importante elegir especies de flores con las características adecuadas:
«Flores como la milenrama, la margarita, la bellis y varias flores umbelíferas son adecuadas para las franjas florales porque tienen flores abiertas con fácil acceso al polen y al néctar, lo que es una ventaja para insectos depredadores, avispas parásitas y abejas solitarias», dice Jachowicz.
El polen y el néctar sirven como complementos alimenticios, permitiendo a los enemigos naturales sobrevivir en ausencia de presas.
Sigsgaard también recomienda que los agricultores elijan mezclas de semillas con especies nativas perennes como la milenrama y la margarita.
Las especies nativas son aquellas que, a través de la evolución, tienen el mejor impacto en los insectos que viven en Dinamarca. Y si son especies perennes, se pueden tener franjas de flores que perduren muchos años si se cuidan adecuadamente.
Los insectos benéficos pueden invernar aquí y aumentar sus poblaciones, lo que beneficia la biodiversidad y la producción vegetal. De esta manera, también se refuerza el argumento económico a favor de tener franjas florales.
Dinámica entre plagas y enemigos naturales en la franja floral y el campo. Al inicio de la temporada, los enemigos naturales pueden alimentarse de los recursos disponibles en la franja floral y, posteriormente, pueden ingresar al campo cuando hay plagas y otras presas.
Franjas de flores en un sistema perturbado
Este metanálisis es el primero que examina exclusivamente el efecto de las franjas de flores en campos con cultivos anuales.
Otros estudios han mostrado numerosos casos de éxito con cultivos perennes, pero existe una diferencia significativa entre el funcionamiento de las franjas florales en un sistema de este tipo y en un sistema que se ve afectado anualmente por el arado y el tráfico de maquinaria. Los campos con cultivos anuales presentan condiciones más desafiantes y complejas para las franjas florales. Sin embargo, también en este caso, el efecto de las franjas florales es claro —afirma Jachowicz—.
Facilitar la recepción de financiación
La política de la UE busca reducir la necesidad de pulverizar pesticidas promoviendo una producción vegetal robusta con el mayor nivel de autodefensa posible, es decir, proporcionando las mejores condiciones posibles para la presencia de enemigos naturales y polinizadores en los campos. Aquí es donde las franjas florales desempeñan un papel importante.
Las franjas florales son un método para promover el equilibrio ecológico y reducir el uso de pesticidas. No son viables por sí solas, pero su ventaja es que se pueden combinar fácilmente con otras medidas preventivas , como la rotación de cultivos y el control biológico. Además, las franjas florales perennes contribuyen a la biodiversidad en el campo abierto, afirma Sigsgaard.
En Europa, existen desde los años 90 sistemas nacionales de subvenciones para la plantación de franjas de flores. Sin embargo, según los investigadores, estas franjas podrían generalizarse aún más si a los agricultores les resultara más fácil solicitar subvenciones para plantarlas.
«Los agricultores nos dicen que es difícil obtener subvenciones para las franjas de flores, en parte porque las normas sobre cuándo sembrarlas y cortarlas son complejas. Hay varios requisitos que cumplir que podrían no coincidir con el objetivo de atraer más enemigos naturales . Por eso, animamos a las autoridades a facilitar la financiación para las franjas de flores», afirma Jachowicz.
Más información: Nika Jachowicz et al., Las franjas florales muy diversas promueven más enemigos naturales en cultivos anuales: Una revisión y metaanálisis, Agricultura, Ecosistemas y Medio Ambiente (2024). DOI: 10.1016/j.agee.2024.109412
