Si está cansado de los insecticidas químicos, pero no quiere que su cosecha sea destrozada por orugas, escarabajos y otras plagas voraces, pruebe a incorporar bitoxibacilina a su sistema fitosanitario: un preparado natural a base de bacterias que combate eficazmente las plagas sin afectar la ecología de su cultivo. Veamos qué es este preparado y cómo usarlo.
¿Qué es la bitoxibacilina? Es un insecticida biológico creado a partir de la bacteria Bacillus thuringiensis . Al penetrar en el organismo de la plaga, la bacteria produce toxinas que paralizan su sistema digestivo.
La bitoxibacilina es segura para personas, animales, lombrices de tierra y abejas (siempre que no les caiga directamente encima). No se acumula en las plantas ni en el suelo. Puede usarse incluso durante la maduración de la fruta. Es eficaz contra muchas orugas, escarabajos de la patata, arañas rojas y otras plagas. Sin embargo, es importante entender que la bitoxibacilina no es la panacea. Esto es lo que escriben los jardineros en sus reseñas: «¡Salvé los pepinos de los pulgones con dos tratamientos!». «La araña roja desapareció, pero tuve que pulverizar tres veces». «No mató a la mosca blanca, pero había menos».
¡La bitoxibacilina es un auténtico luchador multifuncional! Aquí tienes una lista de algunos de sus «clientes»:
solanáceas (tomates, berenjenas, pimientos, patatas)
- Escarabajo de la patata (y sus larvas)
- Polilla de la patata
- Orugas del gusano cortador
Árboles frutales y arbustos (manzano, peral, grosella, grosella espinosa)
Repollo y otras verduras
- polilla de la col
- Col blanca
- Escarabajos pulga crucíferos
Calabaza (pepinos)
- Áfido
- Mosca blanca
- Orugas
- Enrollador de hojas de uva
Flores (rosas, crisantemos, etc.)
- Trips
- Orugas del escarabajo de las hojas
Sin embargo, existen algunos matices al trabajar con la bitoxibacilina. Por ejemplo, la bitoxibacilina actúa sobre los ácaros, tanto larvas como adultos, pero funciona mejor en combinación con fitovermas (los ácaros no son insectos, sino arácnidos, por lo que los preparados puramente bacterianos podrían no ser eficaces).
Suprime eficazmente los pulgones, sobre todo al principio de la infestación. Sin embargo, si la colonia es grande, es mejor añadir una solución jabonosa (40 g de jabón de lavar por cada 10 l) para que se adhieran.
Funciona contra la mosca blanca, pero es menos efectivo que contra las orugas. Es mejor combinarlo con trampas (placas adhesivas amarillas) y rociar con infusiones comunes contra orugas si se ha decidido abandonar por completo los agroquímicos.
Tiempos de procesamiento
La primera pulverización se realiza cuando aparecen las primeras plagas. Los tratamientos se repiten cada 7-10 días (ya que el preparado solo funciona al ingerirlo). El mejor momento es por la mañana o por la tarde, sin lluvia ni viento fuerte.
¿Cómo diluir? Normalmente se utilizan de 30 a 50 g de polvo por cada 10 l de agua, pero es mejor consultar las instrucciones de cada preparación específica. Si hay muchas plagas, aumente la dosis a 60 g.
Método de aplicación
Rocíe bien las hojas, especialmente el envés, ya que a las plagas les gusta esconderse allí. No tema excederse: el preparado es seguro, pero es importante que penetre en el cuerpo de los insectos. Rocíe generosamente, pero no en climas cálidos (superiores a +30 °C), ya que las bacterias mueren rápidamente.
Añade un adhesivo (jabón o adyuvante especial) para que la solución se adhiera mejor a las hojas. No esperes a que se produzca una invasión: ¡más vale prevenir que combatir las plagas! Alterna con otros preparados biológicos (por ejemplo, Fitoverm) para que las plagas no desarrollen resistencia.
No almacene la solución diluida, ya que pierde su eficacia. No la mezcle con productos químicos, ya que los preparados biológicos no toleran sustancias agresivas. Sin embargo, se puede preparar una mezcla ecológica con aditivos naturales para potenciar su efecto.
Por ejemplo, aquí se explica cómo administrar un shock bacteriano de nicotina al escarabajo de la patata y a las pulgas crucíferas. Se necesita polvo de tabaco. El tabaco contiene alcaloides que paralizan las plagas. Vierta un vaso de polvo de tabaco en 5 litros de agua caliente. Deje reposar durante 2 días y cuele. Añada 50 g de bitoxibacilina y rocíe.
Aquí te explicamos cómo preparar un pegamento bacteriano contra pulgones, orugas o tripes. Mezcla 50 g de jabón de lavar (o 3 cucharadas de jabón líquido), 1 vaso de ceniza de madera y 10 l de agua tibia. Deja reposar 1 hora, cuela y vuelve a mezclar con bitoxibacilina.
Para la mosca blanca, los pulgones y los ácaros, puede añadir picante con pimienta y ajo. La pimienta y el ajo irritan la piel de los insectos y las bacterias los matan desde el interior. 100 g de ajo picado, 2 pimientos picantes, 1 l de agua, dejar reposar 24 horas. Colar, diluir en 10 l de agua y añadir bitoxibacilina.
Después del tratamiento con bitoxibacilina, no mojar las hojas durante 5-6 horas (de lo contrario se lavarán).
Si te dedicas a la agricultura ecológica y quieres proteger tus cosechas sin químicos, ¡la bitoxibacilina es la solución! No ofrece una protección total, como si fuera una «artillería pesada», pero con un uso regular reducirá significativamente la población de plagas. ¿Has probado este producto? ¡Comparte tu experiencia en los comentarios!
