Las prácticas actuales de la industria avícola han planteado preocupaciones éticas y ecológicas.
Las preocupaciones éticas incluyen el sacrificio de polluelos machos de un día de razas ponedoras; Las preocupaciones ecológicas incluyen la importación de grandes cantidades de soja para piensos. Ahora, un equipo de investigación de la Universidad de Göttingen ha investigado alternativas como el uso de un cultivo proteico regional como las habas (también conocidas como habas) y razas de pollos de doble propósito (es decir, aptas tanto para carne como para puesta de huevos). Descubrieron que el uso de habas como alimento y razas de doble propósito eran alternativas adecuadas que no afectaban la calidad de la carne de pollo. Sus resultados fueron publicados en Foods .
El estudio se centra en gallos adultos de dos razas locales de pollos de doble propósito (Vorwerkhuhn y Bresse Gauloise) y una línea de puesta de alto rendimiento (White Rock) engordados con piensos cuyas principales fuentes de proteínas eran harina de soja y dos habas (Vicia faba). Dietas con diferente composición. Este estudio se centró en el efecto de la dieta sobre las características de calidad de la carne de estas razas en particular, incluido el análisis sensorial. Los resultados de los análisis fisicoquímicos y sensoriales muestran que las habas pueden incluirse en la alimentación de las aves sin afectar negativamente la calidad del producto.
La composición nutricional de las habas las convierte en un sustituto adecuado de la soja como fuente de proteínas en la alimentación de las aves y tienen la ventaja añadida de mejorar la calidad del suelo fijando nitrógeno. La primera autora, Cynthia Escobedo del Bosque, de la Universidad de Göttingen, dice: «Las habas son leguminosas ampliamente cultivadas que ayudarían a las industrias agrícolas locales al otorgarles una mayor independencia, ya que se liberarían de depender de las importaciones de soja y podrían controlar el precio».
El uso de razas de doble propósito sólo ha sido objeto de investigación en los últimos años. Estas razas no pueden seguir el ritmo de puesta y/o engorde de las razas especializadas. «Nuestra investigación muestra que estas razas producen huevos y carne de pollo de alta calidad, pero en menor volumen», explica el coautor Daniel Mörlein, de la Universidad de Göttingen. «Esto significa que el coste será mayor, pero si los consumidores estuvieran dispuestos a pagar más, se podría mejorar el bienestar animal y la diversidad genética».
Actualmente, cuatro grupos de investigación de la Facultad de Ciencias Agrícolas de la Universidad de Göttingen están examinando las bases para un sistema de producción avícola más sostenible y socialmente aceptado. En el moderno laboratorio sensorial de la facultad se realizan habitualmente estudios de percepción del producto y de aceptación del consumidor.
Más información: Cynthia I. Escobedo del Bosque et al, Parámetros de calidad de la carne y propiedades sensoriales de una raza de pollo de alto rendimiento y dos locales alimentadas con Vicia faba, Foods (2020). DOI: 10.3390/alimentos9081052