Pese a que el país se ha convertido en un destino estratégico para empresas extranjeras que buscan establecerse en el mercado global de cannabis y cáñamo, este floreciente sector no está exento de desafíos, entre ellos el desconocimiento de aspectos esenciales de su producción como el tipo de suelo y los nutrientes idóneos, la cantidad de agua requerida, el clima donde mejor prospera o cómo realizar la cosecha. Para garantizar cultivos exitosos hace falta formación, y para ello la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Palmira y la plataforma de educación virtual agropecuaria AgroClick ofrecen el “Curso técnico en cannabis medicinal y cáñamo”.
Desde la aprobación de la Ley 1787 de 2016, que allanó el camino para el desarrollo de la agroindustria del cannabis medicinal con fines científicos y terapéuticos en el país, Colombia ha surgido como un escenario destacado en el mapa mundial del cultivo de esta planta, por las privilegiadas condiciones geográficas del trópico, que permiten un ambiente propicio para su producción.
Por ejemplo, el territorio cuenta con periodos de luz natural de hasta 12 horas, factor que reduce significativamente los costos y posiciona al país como un destino ideal para la producción de cannabis y cáñamo de alta calidad a un precio competitivo en el mundo. No obstante, el manejo agronómico de los cultivos puede determinar el éxito o fracaso de este negocio agroindustrial del que se pueden obtener fibras, flores, extractos, medicamentos, productos cosméticos, alimentos y bebidas.
Como las plantas pueden ser machos, hembras o hermafroditas, una de las principales dificultades es identificar y eliminar las primeras en cultivos destinados a la producción de flores sin semillas. “Estas pueden arruinar los cultivos al polinizar las flores femeninas y generar semillas no deseadas, pues el sexo solo se detecta durante el crecimiento, y por lo tanto es fundamental monitorear de cerca su desarrollo”, explica el ingeniero agrónomo Jesús Alberto Lozano, de la UNAL, capacitador en AgroClick.
Las flores masculinas se diferencian de las femeninas por presentar pequeños sacos que contienen polen, el cual se esparce para la polinización y fecundación, lo que genera las semillas. Por otro lado, las plantas hembra se caracterizan por los pistilos blancos en forma de pelos ubicados en las ramas y en los nudos donde se desarrollan los cogollos. Estos pistilos son los órganos sexuales femeninos esenciales para la producción de flores.
De otra parte, las plantas hermafroditas pueden tener tanto sacos de polen como pistilos, lo que las convierte en potencialmente autofértiles, capaces de polinizarse a sí mismas y producir semillas sin la intervención de otra planta.
Otro reto de quienes desean incursionar en este cultivo es el desconocimiento del proceso de fotoperiodo, o tiempo en el que las plantas deben estar expuestas a la luz y a la oscuridad, ya que este factor es clave para regular su ciclo de vida, y su manejo inadecuado provoca flores prematuras o tardías que impactan negativamente el rendimiento y la calidad del producto final.
“Durante el desarrollo vegetal de las plantas se suelen proporcionar entre 18 y 24 horas de luz para estimular el crecimiento vigoroso, mientras que en la fase que da flores es común reducir el periodo de luz a 12 horas al día para inducir la floración y el desarrollo de los cogollos”, anota el experto.
La selección genética de semillas adaptadas a las condiciones específicas de cada región, además del acceso a tierras adecuadas y la garantía de tenencia segura, plantean desafíos adicionales, pues aunque el país cuenta con condiciones climáticas favorables, encontrar terrenos apropiados puede resultar complicado para las empresas foráneas y nacionales, que se deben adaptar a la normatividad nacional y al mercado laboral colombiano.
Capacitación para garantizar cultivos exitosos
Ante la importancia de ofrecer capacitación en el manejo agronómico del cultivo de cannabis, la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNAL Sede Palmira y AgroClick –en su plataforma AgroTeach para la formación virtual de profesionales del sector– imparten el “Curso técnico en cannabis medicinal y cáñamo”, que consta de cinco módulos virtuales, sincrónicos y asincrónicos, es decir que cada estudiante será autónomo en su aprendizaje teórico y práctico, y además contará con la posibilidad de intercambiar experiencias.
El ingeniero agrónomo Mauricio Campuzano, egresado de la UNAL Sede Palmira y director ejecutivo de AgroClick, destaca que “el curso se centrará no solo en el manejo agronómico del cultivo de cannabis, sino también en su producción sostenible y responsable para que los participantes reciban una formación holística e integral”.
Según el profesor Mario García Dávila, decano de la Facultad de Ciencias Agropecuarias, “los contenidos abordan la historia, los usos y aplicaciones industriales de estas plantas, aspectos legales y regulatorios, así como los criterios para seleccionar las semillas, preparar el suelo, nutrir las plantas y adelantar las prácticas necesarias para garantizar cultivos exitosos”.