México avanza hacia la prohibición de plaguicidas altamente peligrosos


El gobierno mexicano está trabajando para publicar un nuevo decreto destinado a prohibir el uso de algunos pesticidas particularmente tóxicos. La medida forma parte de una estrategia más amplia para transformar el modelo agrícola del país hacia la agroecología.


Durante su conferencia de prensa matutina del lunes, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció que la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) trabaja en un decreto para prohibir algunos pesticidas altamente tóxicos que aún están permitidos en México pero que están prohibidos en muchos otros países debido a los riesgos que representan para la salud y el medio ambiente, escribe Elisa Galeana, analista de la industria para Mexico Business News.

En su discurso, Sheinbaum enfatizó que si bien el glifosato ya está prohibido, muchos otros pesticidas, como el DDT, aún no están prohibidos oficialmente, aunque ya no se venden en grandes cantidades. 

Se ha vinculado el DDT con toxicidad para el sistema nervioso, daño hepático y renal, cambios hormonales y mayor riesgo de cáncer, así como problemas con el desarrollo cognitivo en los niños. En el medio ambiente, su persistencia y propiedades bioacumulativas lo convierten en un contaminante peligroso que afecta a la vida silvestre al debilitar las cáscaras de los huevos de aves rapaces y mamíferos marinos. Debido a estos efectos, Estados Unidos prohibió su uso en la agricultura en 1972, y el Convenio de Estocolmo de 2001 restringió su uso para el control de la malaria en ciertos países y bajo regulaciones estrictas.

El Presidente destacó que esta iniciativa forma parte de una estrategia integral para transformar el modelo agrícola de México hacia prácticas más sustentables y saludables. Señaló que la lista completa de pesticidas prohibidos incluye muchos que están relacionados con enfermedades crónicas, contaminación del suelo y daños a la biodiversidad. «Este es un paso importante para proteger a nuestros agricultores, consumidores y ecosistemas», dijo Sheinbaum.

Grupos ambientalistas piden la prohibición de pesticidas altamente peligrosos en México. En diciembre de 2024, en el Día Mundial Libre de Plaguicidas, más de 500 organizaciones enviaron una carta a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), así como a la SADER y a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT). 

La carta destacó que México aún utiliza 204 plaguicidas altamente peligrosos (PAP) autorizados por la COFEPRIS. Sin embargo, muchos permisos para estos pesticidas fueron emitidos con validez indefinida y no está claro si todavía se siguen utilizando.

La carta destaca que México cuenta con un régimen regulatorio que prioriza los intereses de las empresas de agroquímicos que dominan el mercado, lo que impacta los derechos humanos, la salud pública y los ecosistemas, debilitando la capacidad de los reguladores para proteger el interés público de los efectos nocivos de los agroquímicos. Las organizaciones también destacaron la necesidad de consultar a las comunidades sobre las implicaciones de permitir el uso de PAP en los contratos de arrendamiento de tierras y de apoyar a las asambleas comunitarias en la actualización de sus normas y trabajar con los municipios para promover políticas agroecológicas libres de agroquímicos y transgénicos.

Rocío Romero, coordinadora del Movimiento Agroecológico Latinoamericano (Maela) en Mesoamérica, enfatiza que el apoyo a la agroecología debe continuar y profundizarse con políticas rurales integrales para mejorar la fertilidad del suelo, controlar plagas y enfermedades agroecológicamente y tomar en cuenta la eficiencia hídrica: “Debemos reconocer el potencial innovador y la experiencia acumulada de las organizaciones campesinas e indígenas en agricultura orgánica y agroecológica y crear espacios para su participación”.

Fuente: Mexico Business News. Autora: Elisa Galeana.