La Universidad portuguesa de Minho (UMinho) lidera un proyecto europeo de 8,3 millones de euros que tiene como objetivo reducir el uso de agroquímicos en la viticultura en un 50%.
En su comunicado, la UMinho dijo que el objetivo es crear nanobiofertilizantes y nanobiopesticidas para el control de plagas en la viticultura para aumentar la producción de uva sin dañar el medio ambiente y reducir los costos de los insumos agroquímicos para los productores.
El proyecto se llama Vinny, reúne a 19 socios de diez países y recibirá 8,3 millones de euros del programa Horizonte Europa durante los próximos cuatro años.
“La Unión Europea es el mayor productor de vino del mundo y está comprometida a invertir en una producción ambiental y económicamente sostenible basada en el conocimiento portugués. El primer encuentro de los participantes ya tuvo lugar en la ciudad de Oporto y en la región vinícola del Duero, en el campo experimental de Quinta do Popa”, informa la universidad.
Pasar de una viticultura intensiva a una sostenible a escala global y reducir en un 50% el uso de agroquímicos en el sector son los principales objetivos del consorcio liderado por Margarida M. Fernández, del Centro de Sistemas Microelectromecánicos (CMEMS) de la Facultad de Ingeniería de la UMinho .
“Estudiaremos los microbiomas de viñedos de Portugal, España, Austria y Dinamarca para formular potentes cócteles con propiedades antifúngicas y fitofarmacéuticas que, mediante nanoencapsulación y estimulación, serán más estables y eficaces”, explica el investigador.
El equipo también creará biofertilizantes con nitrógeno, fósforo y potasio a partir de subproductos de la industria cárnica y del tratamiento de aguas residuales, dijo Margarida M. Fernández.
El proyecto también desarrollará agrotextiles impregnados con nanobiofertilizantes, además de probar la efectividad, eficiencia y seguridad en laboratorio, parcelas piloto y en campo.
“Se espera que se pongan en marcha varios proyectos en colaboración con empresas y asociaciones. El proyecto también incluye una dimensión social a través de la creación de una “Red Europea de Viñedos”, compuesta por tres laboratorios operativos y una sede, para difundir prácticas sostenibles entre agricultores y empresas de la región, estimulando así la innovación y la sostenibilidad en el sector primario. En total, el consorcio reúne a cinco universidades, once empresas y tres asociaciones de diez países”, se lee en el comunicado.
Fuente: UMinho