Vivir sin gluten: un día para hablar de celiaquía


Por Araceli Olivares, investigadora CREAS


Hoy se celebra el Día Internacional del Celíaco, con el fin de visibilizar una enfermedad que afecta aproximadamente al 1% de la población, tanto en Chile como en el mundo. Seguramente habrás escuchado de la celiaquía, que está en aumento su diagnóstico y esto se debe principalmente al conocimiento actual que tenemos de la enfermedad. Pero, ¿de qué se trata?

La celiaquía es una enfermedad autoinmune provocada por la ingesta de gluten, una proteína que se encuentra en el trigo, la cebada y el centeno y que, al ser ingeridos alimentos que la contienen, genera una reacción inmunológica provocando inflamación y daño de las vellosidades del intestino delgado, alterando la absorción de vitaminas, minerales y otros nutrientes produciendo una gran variedad de síntomas y enfermedades como diarrea, gases, distensión abdominal, fatiga, anemia y osteoporosis entre otras.

Esta enfermedad no debe confundirse con la intolerancia al gluten, pues la gran diferencia radica en que pueden existir los mismos síntomas digestivos, pero sin daño intestinal al tener solo una intolerancia. Y, si bien no tiene cura, la mayoría de las personas celíacas pueden seguir una dieta estricta sin gluten, la que permite controlar los síntomas y así permitir a que los intestinos se sanen.

Personalmente, mi celiaquía no contó con síntomas digestivos, por lo que pudo ser diagnosticada gracias a una hematóloga que encontró el origen de mi anemia. Ya es año y medio desde que se me diagnosticó con esta enfermedad autoinmune y me he dado cuenta que cada vez hay más conocimiento de la enfermedad y actualmente hay muchos productos en el mercado (y menú en restaurantes), para personas con esta enfermedad.

En CREAS hemos trabajado con emprendedores para generar prototipos de snacks, pan, masas de pizza entre otros productos sin gluten, por lo que las alternativas no son escasas. Si bien la mayoría de los productos son más caros que un producto con gluten, siempre hay opciones de alimentación naturalmente sin gluten y la posibilidad de preparar alimentos en casa.

En este sentido se debe tener cuidado también con la contaminación cruzada, por ejemplo, el caso de la avena, que contiene una proteína similar al gluten (avenina) podría provocar síntomas similares en algunas personas, pero el mayor problema de la avena es su producción que utiliza las mismas instalaciones donde se procesan cereales que contienen trigo, cebada o centeno. Por lo que es importante revisar las etiquetas y consumir productos certificados; en Chile, la certificación la realiza COACEL y la Fundación CONVIVIR (esta última tiene un listado con productos “libres de Gluten”.