Las zanahorias se encuentran entre las verduras más consumidas por los brasileños. El color naranja indica que este tubérculo es una importante fuente natural de betacaroteno, un pigmento antioxidante y precursor de la vitamina A.
Las zanahorias también contienen fibra y minerales calcio, sodio y potasio. Las zanahorias se comen frescas, se utilizan para cocinar y se procesan para obtener diversos aditivos alimentarios. Sin embargo, en climas cálidos, cultivar zanahorias, una verdura de estación fría, es bastante problemático, por lo que los criadores se han esforzado en crear un híbrido de zanahoria brasileña.
En Brasil, la zanahoria se cultiva anualmente en una superficie de unas 18 mil hectáreas, con un volumen de producción nacional de unas 480 mil toneladas por año. Según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) para 2017, el rendimiento promedio de la zanahoria fue de 26 t/ha, sin embargo, para el nuevo híbrido supera las 60 toneladas por hectárea de tubérculos comerciales.
El híbrido fue desarrollado por la empresa estatal brasileña Embrapa en asociación con Isla Sementes para la siembra de primavera y verano. Entre las características de la variedad se encuentra su resistencia a bacterias y hongos, causantes del tizón de las hojas, que provoca pérdidas en las cosechas.
El tizón foliar se considera una enfermedad importante de la zanahoria durante los períodos más calurosos y lluviosos del año en Brasil. Es causada por un complejo de patógenos, que puede incluir dos hongos: Alternaria dauci y Cercospora carotae , así como la bacteria Xanthomonas hortorum pv. carotae , cuya prevalencia varía según la región y la temporada de crecimiento. Los patógenos pueden detectarse en múltiples infecciones en el mismo cultivo, planta o área afectada.
El investigador en mejoramiento genético de zanahoria de Embrapa Hortálicas (DF), Analdo de Carvalho, responsable por el desarrollo de la nueva variedad, explica que gracias a su resistencia, el híbrido logra cosecha sin ningún control químico de enfermedades foliares. La variedad Embrapa también es resistente al nematodo agallador, lo que, combinado con la resistencia al tizón tardío, constituye un hito histórico en la investigación básica en zanahoria.
Ahora, la combinación de variedades de verano e invierno permite sembrar y cosechar zanahorias en Brasil durante todo el año, vendiendo los tubérculos a precios asequibles para los consumidores. Por parte del productor, la cosecha continua garantiza el flujo de caja.
“Vale la pena enfatizar que los híbridos sólo son beneficiosos en combinación con otras tecnologías en crecimiento. De lo contrario, no tienen ninguna ventaja competitiva sobre las variedades de polinización libre”, subraya el científico. – Otro factor favorable al utilizar un híbrido es la uniformidad que se evidencia desde la germinación hasta la cosecha, lo que también facilita el manejo durante las etapas de crecimiento y cosecha. El resultado son raíces más uniformes y una relación de tamaño más apreciada por el mercado”.
La recolección comienza a los 85 días de la siembra y dura hasta 115 días. El híbrido tiene una forma erecta, hojas de color verde brillante y la altura de la planta alcanza unos 45 centímetros. “La posición vertical favorece la aireación de las plantas, creando condiciones desfavorables para la aparición de enfermedades foliares”, dice Carvalho.
Las raíces miden unos 3,5 cm de diámetro y de 16 a 22 cm de largo, un tamaño comercialmente deseable. Se recomienda cultivar 500 mil plantas por hectárea para promover diámetros y longitudes adecuadas para la comercialización. Las zanahorias híbridas tienen color naranja intenso, sabor dulce, forma cilíndrica y suave, características que se adaptan a los gustos de los consumidores brasileños. La creación del híbrido tomó unos 10 años.
Fuente: Embrapa Autor del texto y de la fotografía: Ghislaine Alencar.
