Si el problema de la rotura del tallo del maíz es crónico, entonces se deben implementar técnicas de manejo para minimizar el daño causado por la rotura del maíz.
Imagínese esto: su cosecha de maíz se ve excelente. La temporada tenía la combinación perfecta de sol y lluvia, luego bam, llega una tormenta con fuertes vientos, los tallos se rompen y sucede todos los años. Los expertos explican el motivo de este fenómeno.
“La rotura del tallo del maíz es una realidad común en algunas regiones productoras. Por lo tanto, vale la pena comprender las causas y las medidas para limitar estas molestias”, señala Mark Grundmeier, agrónomo de LG Seeds en Nebraska con casi tres décadas de experiencia.
Las condiciones de crecimiento ideales pueden preparar el escenario para un punto de inflexión. “Desafortunadamente, el deterioro ocurre cuando hay buenas condiciones de crecimiento: nitrógeno, humedad, luz solar y calor adecuados. Por el contrario, los años en los que el estrés por sequía hace que las plantas se acorten suelen transcurrir con menos o ninguna rotura del tallo. La cuestión es que cuando una planta de maíz responde a condiciones favorables y crece rápidamente, es posible que no tenga la oportunidad de desarrollar lignina entre las placas nodales”, explica el experto, comparando la lignina con los ligamentos de la rodilla. Si el viento golpea antes de que el material conecte estos nodos, pueden ocurrir lesiones graves.
La rotura del tallo del maíz ocurre durante dos ventanas principales: V5-V8 (la etapa vegetativa joven, cuando las plantas aún son frágiles y tienen más material vegetal para que el viento las atrape) y V12-VT (espiga, cuando el tallo se rompe debajo de la mazorca). El factor de riesgo aumenta si el cultivo ha estado expuesto recientemente a la lluvia o está bajo riego de pivote central. Cuando una planta se hincha con agua, sus células son más propensas a romperse; usar un regulador de crecimiento unos días antes del viento puede hacer que las plantas de maíz sean más vulnerables a romperse.
Grundmeier también recomienda utilizar productos como dicamba, 2,4-D y clopiralida hasta el estadio V4. “Todos funcionan muy bien poco después de la aplicación”, afirma.
“Otro consejo es orientar las filas de tal manera que se evite que cualquier dirección de la fila juegue en contra del viento. Las tormentas suelen venir del noroeste. La siguiente recomendación es no espesar los cultivos. Las plantas de maíz no tendrán que estirarse tanto para recibir el sol y sus tallos serán más gruesos”, dijo Grundmeier.
Pero el factor determinante más importante es la genética del híbrido. Si el problema de rotura es crónico, conviene buscar híbridos de maíz con resistencia a este factor.
Una vez que se identifica un tallo roto, Grundmeier recomienda una evaluación cuidadosa de exactamente cuántas plantas están rotas. “Los daños a menudo no son tan graves para el rendimiento general como temen los agricultores. Los drones son excelentes para evaluar daños. Y recuerde que el maíz partido abre el dosel a más luz solar, lo que aumenta la presión de las malezas. Si es posible, es mejor eliminar ese campo lo antes posible”, concluyó el especialista.
Fuente: lgseeds.com
