El Reino Unido se convertirá en el centro mundial del cultivo de insectos comestibles


Con este fin, la Asociación Británica de Insectos Comestibles pide a los funcionarios que simplifiquen urgentemente el acceso al mercado de alimentos y enfatiza que los insectos comestibles son amigos del hombre en la lucha contra el calentamiento global y la deficiencia de proteínas; sin embargo, una legislación demasiado estricta sobre el acceso al mercado de alimentos obstaculiza el desarrollo de la industria.


Abordar el cambio climático ocupa un lugar destacado en la agenda, por lo que la Asociación Británica de Insectos Comestibles destaca el potencial de sus nuevos animales de granja para abordar el problema

La investigación realizada por científicos británicos demuestra que los insectos comestibles tienen potencial no sólo en la industria alimentaria, sino también para reducir el impacto nocivo sobre el medio ambiente.

En primer lugar, los insectos comestibles son una fuente alternativa de proteínas dietéticas. Son ricos en proteínas, contienen todos los aminoácidos, grasas saludables, vitaminas y minerales necesarios. Mientras que la producción de proteína animal, especialmente carne, requiere grandes cantidades de recursos, entre ellos tierra, agua y energía.

Los insectos son varias veces más eficientes a la hora de convertir el alimento en proteínas en comparación con el ganado. Esto es especialmente importante en el contexto de la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero causadas por la ganadería. Reducir el consumo de carne y cambiar a productos alimenticios a base de insectos puede reducir significativamente el impacto negativo de la industria alimentaria en el clima.

Además, los insectos ayudan en la lucha contra los residuos. La mayoría de los desechos de alimentos, como frutas, verduras y cereales, pueden utilizarse como alimento para insectos. Los insectos, a su vez, pueden convertir estos desechos en una rica fuente de nutrientes que pueden utilizarse en la agricultura como fertilizante. Esto reducirá la cantidad de desechos en los vertederos, así como también reducirá la necesidad de utilizar fertilizantes químicos.

A pesar del potencial de los insectos comestibles para combatir el cambio climático, existen desafíos y obstáculos que deben superarse. Las preguntas se relacionan con las leyes y regulaciones de seguridad alimentaria.

Por ejemplo, las regulaciones europeas sobre nuevos alimentos establecen una «barrera de entrada extremadamente alta para las empresas de insectos comestibles e ignoran el potencial de la industria para crear un sistema alimentario más sostenible», según la Asociación de Insectos Comestibles del Reino Unido (UKEIA).

«La organización ha publicado un nuevo informe extenso para la Agencia de Normas Alimentarias para informarles sobre la necesidad de revisar las regulaciones alimentarias, destacando el creciente número de especies de insectos que han sido examinadas por su potencial para el consumo humano», escribe Elizabeth Green en un artículo. publicado por en el portal www.foodingredientsfirst.com . – Una revisión de la literatura científica publicada por la UKEIA encontró que las prácticas agrícolas profesionales darán como resultado ingredientes alimentarios para insectos que no presentan mayores riesgos para la salud que los alimentos que se consumen comúnmente, como el pollo, el cerdo y los mariscos.

La asociación sostiene que las normas efectivas y basadas en evidencia desarrolladas por el sector, así como los requisitos de licencia para los agricultores, garantizarán una fuerte protección al consumidor. El Brexit brinda una oportunidad única para revisar la legislación gubernamental actual sobre nuevos alimentos y realizar cambios que podrían convertir a los criadores de insectos británicos en los más exitosos del mundo. Peter Jackson, director del Instituto de Alimentación Sostenible de la Universidad de Sheffield, que es socio de la asociación, dice que alimentar a una población en crecimiento es un desafío importante. Además de reducir el consumo de carne y fomentar un mayor consumo de frutas, verduras y legumbres, otros enfoques innovadores deberían centrarse en aumentar el consumo de fuentes alternativas de proteínas, como los insectos«.

Las previsiones de la asociación, basadas en las tendencias actuales, muestran que para 2025, las empresas de insectos comestibles del Reino Unido podrían ganar más de 112 millones de libras esterlinas.

Foto: UKEIA.