Los científicos holandeses están trabajando con los principales productores nacionales de carne de cerdo para probar varios piensos y aditivos alimentarios modernos para dietas sostenibles.
Mediante el uso de un alimento optimizado bajo en proteínas y dos aditivos que mejoran significativamente la utilización de proteínas, las emisiones de amoníaco en los cerdos de engorde se pueden reducir en un 20%. Al mismo tiempo, todos los resultados del feedlot mejoran significativamente. Así se desprende de los estudios de caso de un consorcio de grandes empresas de la industria de piensos y porcinos: Fransen Gerrits, DSM-Firmenich y Innovation Park De Vlier.
El objetivo final es reducir las emisiones de amoníaco en un 85% evitando que se forme amoníaco en la fuente, combinando una alimentación optimizada con un procesamiento centralizado del estiércol.
El estudio también probó dos suplementos de DSM-Firmenich con un alimento adaptado optimizado para permitir que los cerdos produzcan la mayor cantidad de carne posible con un mínimo de proteína en el alimento.
Uno es el ácido benzoico altamente purificado, que se ha demostrado científicamente que reduce las emisiones de amoníaco. El segundo es un producto con una combinación de hierbas y aceites esenciales. Este complemento proporciona una mayor producción de pepsina, una enzima que descompone las proteínas en aminoácidos, que el cerdo utiliza para producir proteínas musculares. Además, el suplemento proporciona una reducción de las reacciones inflamatorias.
El pienso se utilizó en una granja de cerdos de engorde de 480 cabezas en el Innovatiepark De Vlier. La mitad de los cerdos recibió el pienso de control normal, la otra mitad recibió el pienso de prueba optimizado con suplementos. En los sitios de prueba y control, las emisiones de amoníaco se midieron continuamente durante todo el ciclo utilizando dos medidores diferentes.
Las emisiones de amoníaco en el compartimento de alimentación de prueba fueron un 20 % más bajas y tuvieron menos variación de emisiones. En los resultados técnicos también se hizo evidente una mejor utilización de las proteínas. Los cerdos alimentados con la dieta de control lograron una ganancia de 952 gramos por día y un índice de conversión alimenticia de 2,3. Los cerdos alimentados con el pienso de prueba crecieron 1.016 gramos por día con un índice de conversión alimenticia de 2,18.
Fuente: Fransen Gerrits.
