Científicos japoneses han desarrollado una nueva variedad de trigo sarraceno autofértil


Y otro con sémola pegajosa y dulce. La secuenciación de alta precisión del genoma de las variedades de trigo sarraceno da la esperanza de aumentar el rendimiento de este cultivo con una importancia creciente.


Dado que se prevé que la población mundial alcance los 9.700 millones para 2050, la dependencia mundial actual de los tres cultivos principales (arroz, trigo y maíz) está estimulando el interés en cultivos alimentarios menos comunes.

La secuenciación de los genomas de estos cultivos utilizando tecnologías de secuenciación de próxima generación podría permitir que se cultiven de manera eficiente, un paso fundamental para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU de Hambre Cero, Buena Salud y Riqueza y Consumo y Producción Responsables.

Un equipo de investigación dirigido por la Escuela de Graduados en Agricultura de la Universidad de Kyoto ha descifrado la secuencia altamente precisa del genoma del trigo sarraceno a nivel cromosómico, y este es un paso clave para desentrañar la evolución del genoma del trigo sarraceno y el origen del cultivo. dicen los investigadores en un comunicado de la universidad.

Mediante la modificación de genes específicos en un método independiente de las técnicas convencionales de edición del genoma, los investigadores ya han desarrollado con éxito una variedad autofértil de trigo sarraceno, así como un nuevo tipo de cultivo de este grano con una textura pegajosa similar al mochi. Mochi es un postre japonés hecho de una variedad especial de arroz glutinoso con un sabor dulce.

(Fuente: Universidad de Kyoto. Foto: Dmitry Lukyanov)