El ministro de Agricultura alemán, Cem Özdmir, que durante mucho tiempo rechazó la idea de suspender la regla obligatoria de rotación de cultivos en el marco de la Política Agrícola Común de la UE, cambió de opinión y anunció su intención de promover la siembra de cereales en tierras que deberían haberse dejado en barbecho. este año. Pero hay matices.
Simon Michel-Berge habló sobre los peligros de la suspensión de la rotación de cultivos en Alemania en un artículo del portal Agrarheute.com.
“El ministro de Agricultura alemán, Cem Ozdmir, quiere aprovechar la oportunidad que le ofrece la Comisión de la UE para suspender las normas obligatorias de rotación de cultivos y las reservas de tierras de cultivo para proteger la biodiversidad y la salud del suelo en 2023. Al mismo tiempo, se invita a los agricultores a decidir individualmente si lo quieren o no. Sin embargo, quienes aprovechen las oportunidades perderán los subsidios ambientales.
Según el Ministerio de Agricultura alemán, una propuesta de compromiso presentada por Özdemir el viernes de la semana pasada establece que las zonas de protección de especies adicionales no entrarán en vigor hasta al menos 2024, cuando deberían introducirse ya en 2023.
Según este reglamento, parte de la tierra agrícola debe ser utilizada para la protección de especies prohibiendo el cultivo de un mismo producto durante dos años seguidos en el mismo terreno para proteger el suelo.
Como anunció el Ministerio Federal de Agricultura, las reglas de rotación de cultivos se suspenderán una vez en 2023, lo que permitirá a los agricultores alemanes, por ejemplo, plantar trigo tras trigo. Pero el trigo cultivado debe ser de calidad alimentaria. Literalmente, Ozdemir dijo esto: “Tomo la palabra de todos: hago este compromiso por el bien de un plato, y no para que el grano esté en un tanque o comedero”.
Según el Ministerio Federal de Agricultura, la asignación obligatoria del 4 % de la tierra cultivable para fines ecológicos limita el cultivo únicamente a cereales (excepto maíz), girasoles y legumbres (excepto soja).
Los agricultores que utilicen la adquisición obligatoria anterior del 4% de su tierra para cultivar cultivos herbáceos perderán su elegibilidad para los subsidios ambientales.
Los agricultores que no tengan barbechos obligatorios en 2023 no podrán participar en el ecoesquema, que proporciona una financiación de 1.300 a 300 euros/ha.
Según los editores de Agrarheute, surge la pregunta de por qué la Comisión de la UE salió tan tarde con una propuesta para suspender las reglas de rotación de cultivos. No es fácil para los agricultores decidir si sembrar la tierra en barbecho o no, porque entonces se pierde la financiación. Además, en algunos estados federales, el apoyo de segundo nivel se basa en gran medida en la regulación orgánica. Además, es posible que los agricultores ya hayan pedido semillas, fertilizantes y otros insumos en función de un cálculo anterior. Finalmente, en vista de los altos precios de los granos, es probable que muchos agricultores consideren si tiene sentido para ellos participar en esta medida temporal”.
(Fuente: www.agrarheute.com. Foto: Dmitry Lukyanov).