Lo que debes saber sobre esta enfermedad de cuarentena que provoca raíces peludas
El benivirus del amarillamiento necrótico de las venas de la remolacha (BNYVV) es un patógeno de cuarentena para la Federación Rusa que afecta principalmente a las plantas de remolacha azucarera, causando rizomanía (“barba” de raíces). También infecta el tabaco, la espinaca y algunos otros cultivos y malas hierbas.
La enfermedad se descubrió por primera vez en Japón en la década de 1950 y en Italia alrededor de 1959. Durante las dos décadas siguientes, el virus se propagó por el centro, el este y el sur de Europa. Actualmente, se ha detectado benivirus en 29 países.
Los síntomas de la rizomanía se caracterizan por el retraso del crecimiento y la proliferación de las raíces laterales de la raíz pivotante principal, color amarillo-marrón de los haces vasculares. Si se infesta temprano, las plantas se marchitan, se marchitan y eventualmente mueren. Las raíces principales se vuelven muy pequeñas y las raíces laterales crecen con fuerza. Cuando se infecta en un período posterior, la raíz primaria adquiere la forma de un nabo debido al crecimiento excesivo. Las hojas se vuelven cloróticas y de color amarillo pálido, el pecíolo se alarga. En forma latente, la infección puede no causar síntomas evidentes.
El portador de la rizomanía es el plasmodio Polymyxa Betae , que también funciona como depósito de benivirus. En condiciones desfavorables, forma esporas y puede permanecer latente hasta por 10 años.
Se requiere una alta humedad del suelo para que Plasmodium Polymyxa Betae libere el virus. Esto puede ser el resultado de lluvias excesivas, riego excesivo, sistemas de drenaje deficientes. La mala estructura del suelo es un factor importante en la causa de casos graves de BNYVV, lo que hace necesaria la rotación de cultivos y la labranza para minimizar la posibilidad de un brote grave.
Se deben tomar precauciones para evitar la propagación de la enfermedad. Las áreas donde se produzcan semillas y tallos de remolacha deben estar bajo vigilancia fitosanitaria constante.
También se recomienda abstenerse de cualquier tipo de riego durante las seis semanas posteriores a la primera germinación de la planta.
Para establecer el agente causal de la rizomanía, no basta con realizar una inspección visual. Se requiere diagnóstico de laboratorio, que se basa en métodos genéticos moleculares y serológicos.
